Rumí: «La segregación no es la solución a la crisis, que estamos viviendo todos»

La Razón, EFE- Madrid, 06-02-2009

La secretaria de Estado de Inmigración y Emigración, Consuelo Rumí, ha asegurado que «la segregación no es la solución a la crisis, que estamos viviendo todos, españoles y extranjeros».
Durante su intervención en el Foro de la Nueva Sociedad, Rumí ha lamentado los brotes de xenofobia surgidos en el Reino Unido y ha mostrado su confianza en la convivencia e integración demostradas por la sociedad española ante el fenómeno de la inmigración.
«Lo que ha sucedido en el Reino Unido no es positivo, la salida de la crisis económica nunca va a ser con la segregación, ya sea de colectivos españoles o extranjeros», ha dicho Rumí. En este sentido, ha apostado por «la sociedad española y por cómo ha conformado con toda normalidad la convivencia que llevamos desarrollando muchos años en nuestro país».
«No se puede olvidar que durante los años de expansión, en los que hacían falta tantos trabajadores que no había en el mercado español, contratamos a extranjeros, que han cotizado y pagado sus impuestos, sería injusto e insolidario que nos olvidáramos de ello».
La secretaria de Estado ha pedido que no se aliente estos sentimientos en contra de los extranjeros en momentos de crisis, «cuando tenemos que dar un ejemplo de que esto nos afecta a todos, no hay enemigos entre los ciudadanos».
Rumí se ha referido durante su discurso a la reforma de la ley de Extranjería, para convertirla en una «ley de inmigración» y ha aclarado que no es «una ley más dura, sino más segura». Ha rechazado que esté vinculada a la situación de crisis económica y que el Gobierno quiera utilizarla para frenar la llegada de inmigrantes.
«El Gobierno no contrata directamente», sino que cuantifica las necesidades del mercado laboral según las demandas de los empleadores y permite la contratación cuando no encuentran trabajadores en el país.
Ha explicado que ha disminuido el contingente de trabajadores contratados en origen más del 90 por ciento, porque se ha reducido el catálogo de ocupaciones de difícil cobertura, que se ciñen especialmente al ámbito de la salud y del sector de las comunicaciones.
«La prioridad del Gobierno tiene que ser la contratación interna, es decir, de los españoles y de los extranjeros con autorización para trabajar que han caído en el desempleo».
Rumí ha destacado que España ha sido la impulsora de la directiva europea que acuerda la imposición de sanciones administrativas y, en algunos casos, penales a los empresarios que den trabajo a inmigrantes en situación irregular y ha recordado que la mayoría de estas medidas ya están incorporadas en nuestra legislación.
Respecto a una posible reforma legislativa planteada desde el Gobierno canario en relación con los menores inmigrantes no acompañados y la propuesta del Parlamento de esta comunidad de que el Estado asuma la tutela de estos jóvenes, Rumí ha pedido que se aborde este «tema delicado y complejo» con mucha prudencia.
En este sentido, ha opinado que «abordar el tema del menor en la Ley de Extranjería no es el lugar más adecuado, y si lo fuera en la Ley del Menor, no me corresponde a mí».
La secretaria de Estado se ha mostrado en contra de la decisión de la Junta Electoral Central de exigir la fotocopia del DNI en el voto por correo de los emigrantes, porque la mayoría de los españoles que residen en el extranjeros no lo tienen, no lo necesitan para vivir en sus países, y para hacérselo deben viajar a España.
«Muchos ciudadanos españoles no van a poder ejercer el voto, el mayor derecho como demócratas que tenemos», ha dicho Rumí, quien ha lamentado que esta decisión se produzca «al final del proceso» electoral.
«Tenemos que avanzar en una serie de medidas que posibiliten el voto directo en todo lo que significa la ciudadanía exterior», ha añadido Rumí, quien ha apostado por la creación de una circunscripción exterior para posibilitar el voto en las urnas de los españoles que viven en el exterior.

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