vitoria. La diputada de Política Social, Covadonga Solaguren, sigue a la espera de que concluyan las obras del centro de menores extranjeros no acompañados para poder proceder a su inauguración. “No tenemos una premura excesiva”, explicó ayer en ese sentido. Y es que, a su juicio, lo importante es que la adaptación se haga correctamente a las necesidades del nuevo servicio.

Los contratiempos en las obras, como las últimas inclemencias derivadas del tiempo, y el volumen de trabajo son las razones que la diputada esgrimió para justificar que el citado centro no tenga todavía fecha oficial de apertura, a pesar de que estaba prevista para principios de este ejercicio.

Mientras tanto, los menores extranjeros no acompañados siguen siendo atendidos por la Cruz Roja, en el santuario de Estíbaliz y en los pisos de emancipación, todos ellos a la espera del ansiado y a la vez polémico centro. Y es que el proyecto incluye la posibilidad de que estos chavales puedan acceder a un área educativa donde desarrollarse y un lugar en el centro de la capital alavesa para una mayor integración en la ciudad.

Una decisión que no ha gustado demasiado a los vecinos del centro Molinuevo, donde se están efectuando las obras para adecuarlo al nuevo servicio. Y es que aseguran que eso puede traer problemas al barrio.