La Policía Nacional ha detenido a una pareja a la que acusa de haber propinado una brutal paliza a la hija, de 7 meses, de la mujer. El espeluznante suceso a punto ha estado de costar la vida a la pequeña, que sufre roturas de huesos, un golpe en la cabeza y desnutrición, según indicaron fuentes policiales. El presunto caso de malos tratos se destapó después de que el padre biológico de la pequeña denunciara los hechos.

El pasado día 20, martes, a un vecino de Parla ya no le quedaban dudas de lo que venía sospechando: alguien estaba maltratando a su hija, de tan sólo 7 meses. El hombre, separado de su mujer, no dudó en acudir al Hospital Infanta Cristina, en Parla, para que atendieran a la bebé. Pero allí, los facultativos, conscientes de la gravedad de los hechos, decidieron derivar el caso al Hospital Doce de Octubre.

Los médicos que asistieron a la menor le diagnosticaron traumatismo craneoencefálico, varias fracturas de las extremidades, malnutrición y deterioro general. Los médicos, además, indicaron que las heridas eran «incompatibles con lesiones accidentales a una menor de 7 meses, por lo que presuntamente podrían haber sido provocadas». El diagnóstico era claro: la niña estaba grave, aunque las últimas noticias señalan que, dentro de ese estado, se encuentra estable.

El padre de la pequeña avisó a la madre, identificada como E. C. F., de nacionalidad española y de 24 años. La mujer expresó su intención de acudir al centro hospitalario. Pero, paralelamente, la Policía se presentó en el Doce de Octubre, e interrogó al padre. Explicó que la madre estaba al cuidado de la niña y que se dirigía en esos momentos hacia el hospital.

Un chichón

Agentes del Grume se hicieron cargo del caso y detuvieron a la madre y a su pareja, el ecuatoriano M. M. M., de 25 años. Ambos están acusados de malos tratos en el ámbito familiar. En su declaración manifestaron que todo se debió a un accidente, puesto que, según su versión, la bebé se cayó y se golpeó la cabeza. No le dieron más importancia porque consideraron que sólo se trataba de «un vulgar chichón».

Ingreso en el CIE

Pero los indicios apuntan a que podría tratarse de un caso de malos tratos continuados, y una señal sería la malnutrición que sufre la niña. Además, el varón detenido tiene antecedentes por riña tumultuaria y lesiones, además de encontrarse en situación ilegal en España.

Se le ha abierto un expediente de expulsión por procedimiento preferente y se ha ordenado su ingreso en el Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE). La pareja ha pasado a disposición judicial, a la espera de que el juez decida su situación.