almería – La provincia de Almería volvió ayer a ser escenario de la violencia entre inmigrantes. Con todo, las causas de la reyerta que costó la vida a un joven de 26 años procedente de Gambia no parecen ser ni el robo ni el racismo; todo podría haber sido derivado de una enajenación mental.
K. K., de 25 años y nacionalidad malí, detenido tras dar supuestamente muerte con un palo de madera a la víctima, podría haber actuado bajo los efectos de un cuadro clínico de enajenación mental, según apuntaron los compañeros con los que vivía en el paraje El Ayudante de Pampanico, en El Ejido. Además, un parte médico emitido por el Hospital de Poniente revela que fue atendido a las 03:00 horas de ayer debido a que sufría alucinaciones, informa Ep.
Fuentes de la investigación detallaron que no consta que el acusado, de 25 años, consumiese estupefacientes o que tuviese relación con el fallecido, sobre el que, tal y como relataron los testigos presenciales, se abalanzó de repente mientras profería gritos, cuando éste transitaba por la zona junto a una tercera persona en busca de jornal en una cooperativa agrícola cercana.
Siete heridos
El acusado, visiblemente trastornado, comenzó a propinar golpes en la cabeza a la víctima y después se revolvió contra varias personas que, desde los vehículos que circulaban por el paraje, le increparon e intentaron frenarlo. La agresión, que se produjo pasadas las 09:00 horas, se saldó con al menos siete heridos, entre ellos el gerente y la encargada de la cooperativa agrícola. El presunto homicida pudo ser reducido finalmente por varias patrullas de la Policía Nacional, que procedieron a su detención. Pasará a disposición judicial el próximo jueves.