Pérez Burrull no anduvo fino en el área del Real Madrid, pero sí detectó y reseñó en el acta del partido la presencia de simbología nazi en el Bernabeu. Literalmente escribió lo siguiente: “Se observó la presencia en uno de los fondos de banderas y telas con simbología ultra o radical, escuchándose además cánticos que hacían alusión a la ´cámara de gas, muerte a Osasuna, siempre fascistas´ acompañado todo ello de gestos y señales de tipo fascista. Lo cual se comunica tanto al delegado de campo como al coordinador de seguridad al finalizar el partido”. A pesar de incidentes como los ocurridos en las categorías inferiores catalanas, este tipo de denuncias arbitrales suelen acabar con una simple multa de Competición.