El director de Cáritas Interparroquial de Gandia, Javier Roche, mantuvo una reunión con representantes de la Insigne Iglesia Colegiata de este municipio para abordar los usos y la apertura del centro situado en la calle Duque Carlos de Borja, cuya construcción ha corrido a cargo de la Seu, propietaria del mismo.

Este edificio se rehabilitó y se inauguró en octubre, pero todavía no está abierto porque no se había llegado a acuerdos con las condiciones.

Roche manifestó que en las próximas semanas este lugar se convertirá en la sede social y en el mayor centro de actividad de Cáritas, ya que todavía hay que solucionar algunos flecos y equipar el inmueble.


Traslado de servicios

Se trasladarán a él buena parte de los servicios que esta institución benéfica está llevando a cabo. Uno de ellos es el de acogida que en estos momentos está en la plaça de l’Ajuntament, pero habrá más como actividades de formación, voluntariado, o la atención a inmigrantes que ahora se está desarrollando en el local de la calle Curtidors, número 12.

“La idea desde Cáritas es acogernos a la ordenanza para las entidades sociales del Ayuntamiento”, indicó Roche.

Por otro lado, una de las principales apuestas desde Cáritas son las empresas de inserción, las cuales como todavía se ha definido su regulación en la Comunitat Valenciana, en la localidad de Gandia se está haciendo cargo del servicio de los contenedores de ropa y su tratamiento la Fundación denominada José María Haro Intra.

“El objetivo principal de esta interesante iniciativa no es otro que constituir un sistema que se pueda autofinanciar.

Este trabajo, además de ayudar a la gente que necesita ropa, crea empleo a personas con riesgo de exclusión social”, subrayó el director de Cáritas de Gandia.