Cuatro jóvenes de origen magrebí, con edades comprendidas entre 13 y 16 años, que se habían fugado de un centro de Donostialdea, fueron localizados en la madrugada de ayer, hacia las 4.00 horas, en la calle Errebal de Eibar y trasladados a la comisaría de la Ertzaintza para ser devueltos a la residencia.
Según informó ayer la Policía Municipal, una patrulla que realizaba su recorrido habitual a esa hora observó a un grupo de jóvenes en la céntrica calle Errebal a las 4.00 de la madrugada. «No se encontraban en actitud sospechosa ni estaban haciendo nada especial, pero a los agentes les llamó la atención que a esa hora, y con la temperatura que había rondando los 0 grados, y en un día laborable, estuvieran en la calle cuatro jóvenes», aseguraba ayer el jefe de la Guardia Urbana, José Miguel Calle.
Los policías se acercaron al grupo con objeto de interesarse por su situación e identificarlos y ellos mismos les informaron de que se habían fugado de un centro de acogida de la zona de Donostialdea en la que se encuentran ingresados. Se trataba de cuatro jóvenes de origen magrebí. Uno de ellos tenía 13 años, dos eran de 14 años y el cuarto de 16 años. «Parece que tenían mucho frío y se identificaron enseguida, en cuanto se acercaron los agentes», asegura Calle.
La patrulla de la Policía Municipal les trasladó a la comisaría de la Ertzaintza de Eibar para que se hicieran cargo de ellos y fueran trasladados hasta el centro en el que residen en Donostialdea.
Es la primera vez que en Eibar se localizan jóvenes que se han escapado de centros de acogida de menores, una situación que es habitual en municipios de la zona de Donostialdea, comarca en la que existen varios centros de estas características. El jefe de la Policía Municipal eibarresa indica que la lejanía geográfica de Eibar con respecto a estos municipios limita el traslado y la posible aparición de estos jóvenes en el municipio, «tal y como ocurre de forma habitual en localidades del entorno de San Sebastián».