La crisis ha tardado en notarse en Navarra, pero “ya ha llegado”. Y afecta de manera especial a los más vulnerables. Un ejemplo es el aumento de un 20% de las personas que este año han llamado a la puerta de Cáritas Pamplona – Tudela, 3.294 frente a las 2.739 personas atendidas por el Servicio de Acogida en 2007. Además, el albergue de transeúntes ha estado a tope, con 2.096 usuarios, un 16,4% más que el año pasado, y 479 solicitudes que no pudieron ser atendidas por falta de plazas.
En el centro de día San Miguel, la cifra ha crecido en un 49%. Y se espera que las cosas empeoren.

“Vienen tiempos difíciles, tiempos duros, en los que va a hacer falta el esfuerzo de todos”. Así lo afirmaron ayer el delegado episcopal de Cáritas, Ángel Iriarte, la secretaria general, Maite Quintana, y el responsable de acción social, Vicente Blasco, durante la presentación de la tradicional Campaña de Navidad.

El perfil de quienes están llegando a Cáritas es el de personas de 18 a 50 años, mujeres aunque cada vez más también hombres, inmigrantes (80%), aunque cada vez más españoles, que se han quedado en paro, han consumido la prestación por desempleo y no tienen recursos. También hay inmigrantes que han venido de otras comunidades, hace menos de 6 meses, en busca de trabajo.

Para Ángel Iriarte, los datos evidencian la crisis que está afectando ya a los ciudadanos de a pie ,y en especial a los más vulnerables. “El número de personas que se encuentran en situación de pobreza está aumentando” , dijo. También se ve que el factor fundamental “es el paro, con todo lo que implica”. Otro efecto es que crece “el número de personas sin ingreso alguno”. Y, además, con el agravante de que, como explicó, "mientras que en las crisis anteriores (finales de los 70, principios de los 90) la familia actuó como “colchón”, hoy la estructura familiar se ha vuelto más vulnerable, y en el caso de la población inmigrante, inexistente".

Asimismo, alertó sobre otros colectivos más “invisibles”, como las viudas, que deben hacer frente a una elevada subida de los precios de los productos básicos con unas pensiones muy bajas.

Para hacer frente a estos “tiempos difíciles”, Cáritas demanda a las Administraciones Públicas “estar atentas”. “Somos conscientes de los esfuerzos que se están haciendo, por ejemplo desde Asuntos Sociales. Pero ellos y nosotros sabemos que van a hacer falta más esfuerzos”, declaró Iriarte. A las administraciones locales les piden “un esfuerzo por agilizar en los servicios sociales de base la atención a las personas en situaciones precarias” – se han detectado casos de 3 meses de espera – y un esfuerzo presupuestario en ayudas, como las de emergencia. Por último, a toda la sociedad Cáritas hace un “llamamiento a la solidaridad”, en Navidad y durante todo el año.