La de Ciudad Jardín es una feria peculiar: se trata de divertirse, pero a la vez de ayudar a los demás. Voluntariado, diversidad y solidaridad se dan la mano en la segunda edición de este encuentro de los Voluntarios y las Migraciones, que congregó ayer en Ciudad Jardín a cientos de asistentes, que recorrieron los 80 expositores de la muestra. Una muestra cuyo objetivo es implicar y sensibilizar a los malagueños en el voluntariado. Asimismo, sirvió de preludio al Día de las Migraciones que se celebrará el 18 de diciembre.
La feria estuvo amenizada por música de distintos estilos y países. Una ‘batukada’ dio la bienvenida, a cargo de la asociación Costa de Marfil y Sol. Desfiles de moda africana mezclados con el baile flamenco y las canciones ucranianas, para mostrar la diversidad cultural de Málaga.
Muchas de las entidades presentes, además de proporcionar información sobre su actividad, mostraban objetos de decoración y complementos a precios solidarios para financiar su labor.
María José del Pino se emocionaba al mostrar una mesa repleta de artículos de barro moldeados y pintados «con mucho esfuerzo y paciencia» por niños autistas. El dinero de la venta estará destinado a la celebración de las fiestas navideñas de esta asociación. Al igual que Dimbalico, entidad que junto a Protección Civil recaudó fondos con la venta de collares y pulseras para la construcción de una escuela en Senegal.
Los productos gastronómicos fueron clara demostración de la interculturalidad allí presente. La paella se pudo degustar junto con fataya, una empanada típica senegalesa, y con productos típicos paraguayos y bolivianos, entre otros.
Los niños pudieron disfrutar de diferentes actividades lúdicas y una zona de juegos con talleres de pintura facial y de flores secas.
Organizaciones sin ánimo de lucro de todos los ámbitos compartieron el mismo techo: salud, cooperación internacional, cultura, ecología e inmigración. Para las voluntarias de Adaner, por ejemplo, ayer fue un día festivo: «Tenemos terapias todos los días. Hoy es un momento para estar alegre con todos los voluntarios».