El castellano y el euskera conviven a diario en el País Vasco con los diferentes idiomas, hasta un centenar, en que se expresan inmigrantes de más de 170 nacionalidades. Según un informe del Observatorio Vasco de la Inmigración y el equipo técnico de Amarauna – Unesco Etxea, esta variedad de lenguas, la mayor que se ha dado en la historia de la comunidad autónoma, deberá ser tenida en cuenta a la hora de tomar decisiones en materia de política lingüística. Como apuntan los redactores del estudio, el uso del español en la comunidad inmigrante repercutirá inevitablemente en el proceso de recuperación del euskera.