| NUEVA YORK, EE.UU.

Asesinos de ecuatoriano en NY pueden recibir penas de 25 años de cárcel a cadena perpetua.

Ayer en la mañana terminó el suspenso sobre la gravedad de los cargos contra los miembros de la pandilla de adolescentes racistas que la madrugada del domingo 9 terminó con la vida del inmigrante ecuatoriano Marcelo Lucero Lucero. El hecho ocurrió en las inmediaciones de la estación de trenes de Patchogue, condado de Suffolk, en Long Island, Nueva York.

El fiscal del condado, Thomas J. Spota, abrió el sobre que contenía las acusaciones contra Jeffrey Conroy, sindicado como autor de la puñalada mortal contra Lucero, y contra los pandilleros Jordan Dasch, Anthony Hartford, Nicholas Hausch, Christopher Overton, José Pacheco y Kevin Shea.

Conroy fue acusado de homicidio en segundo grado agravado por odio racial, mientras sus compañeros de fechorías eran imputados por asalto en pandilla con odio racial.

El hombre que blandió el puñal asesino podría recibir una condena que va desde los 25 años de cárcel hasta cadena perpetua. Los demás podrían ser sentenciados a 25 años de prisión. A ello se sumarán las condenas que, de ser hallados culpables, reciban por los otros delitos que se les imputan.

La acusación fiscal no quedó allí. Spota presentó al juez C. Randall Hinrichs y al Gran Jurado evidencias contra los agresores por asalto frustrado en pandilla con implicaciones raciales contra Ángel Loja, ecuatoriano amigo de Lucero, quien logró librarse de los golpes y avisar a la Policía para que detenga a los pandilleros.

La Fiscalía informó al juez y al Gran Jurado que el ataque a los ecuatorianos no fue el único delito que cometieron Conroy y sus seis cómplices en menos de 24 horas.

Según los testimonios presentados por el abogado acusador, Gerardo Mejía, y aceptados por la Fiscalía, media hora antes de matar a Lucero, los mismos siete pandilleros atacaron a otro hispano, Héctor Sierra, quien logró escapar.

Sierra, de 55 años, residente en Patchogue, explicó al Fiscal que sufrió la agresión cerca de la medianoche del sábado 8.

“El mismo grupo me golpeó rudamente en la cabeza y caí en media calle. Entonces empezaron a patearme y yo pensé que la intención de ellos era matarme. Logré reaccionar y escapar para enterarme después del asesinato de Marcelo Lucero”, comentó Sierra.

Otra acusación de la Fiscalía señaló a Nicholas Hausch y Jordan Dasch como autores de asalto en segundo grado como crimen de odio contra el hispano Marlon García, delito cometido a las 05:00 del pasado sábado 8 de noviembre. Ambos delincuentes portaban pistolas, según dijo el Fiscal.

Todos los acusados se declararon inocentes. No obstante, Overton, de 16 años, está esperando sentencia por robo con allanamiento de morada cometido en mayo del 2007. El propietario de la vivienda, Carlton Shaw, de 38 años, residente en Patchogue, fue encontrado muerto en el patio de su casa por un vecino.

El cónsul de Ecuador en Nueva York, Jorge López Amaya, quien se reunió, junto al abogado de la familia Lucero, con el fiscal Spota antes de la formulación de cargos, señaló que el aumento de estos contra los asesinos de Marcelo Lucero satisface al Gobierno ecuatoriano y a nuestra comunidad.

“Es lo que habíamos planteado a las autoridades, pero falta aún que los comisionados de Educación del condado de Suffolk acepten que es necesario un cambio para la enseñanza de reglas de tolerancia para con los inmigrantes”, agregó el funcionario ecuatoriano.

Nadie exculpa a los siete adolescentes por el crimen del ecuatoriano Lucero, pero cuando se buscan las raíces de la fobia antiinmigrante, dirigentes pro inmigrantes, religiosos y periodistas aseguran  que ese peligroso ambiente creció en la oficina del ejecutivo del condado, Steve Levy.

ANTECEDENTES: De Gualaceo a NY.

En EE.UU.
Oswaldo Marcelo Lucero Lucero tenía 37 años y los últimos 15 residió con sus documentos en regla en Estados Unidos, desde donde asumió el cuidado de su madre, Rosario Lucero, y su hermana Isabel.

Trabajo
El migrante, oriundo de Gualaceo, en la provincia del Azuay, laboraba en una tintorería ubicada en Patchogue, en el condado de Suffolk, en Long Island, Nueva York (EE.UU.).

Visita prevista
Según sus familiares, Lucero había previsto regresar en diciembre desde Estados Unidos a Gualaceo, para pasar con su madre en su cantón natal.