El delegado del Gobierno, Gregorio Escobar, informó ayer de que las obras de reconstrucción de la valla que separa Melilla de Marruecos, y que se derribó como consecuencia de las últimas lluvias, podría estar reparada este fin de semana.

De esta manera, Gregorio Escobar explicó que los trabajos en el perímetro fronterizo están siendo muy «intensos» para que antes de que concluya la semana esté reparada la valla exterior derribada como consecuencia del fuerte caudal que el arroyo Mezquita llevaba a raíz de las inundaciones que sufrió el país vecino.

Igualmente, el delegado del Gobierno recordó que desde el pasado lunes ya están patrullando los 36 nuevos guardias civiles procedentes del Grupo Rural de Seguridad (GRS), por lo que los agentes de la benemérita encargados de vigilar la valla que separa Melilla de Marruecos se ha visto reforzada con la incorporación de estos nuevos miembros.

Además, Escobar destacó que las fuerzas de seguridad del reino Alauí están colaborando de manera activa para «evitar y prevenir» que se produzcan nuevos intentos de entrada masiva de forma irregular.

La normalidad parece que ha vuelto al perímetro fronterizo después de que la madrugada del pasado domingo 2 de noviembre, un grupo de 13 subsaharianos armados con palos y piedras, de los cuales cuatro se introdujeron en la ciudad autónoma, se lanzaran contra la zona derruida de la valla hiriendo en su intento de entrada a tres guardias civiles cuando intentaban acceder por la fuerza.