BIARRITZ, Francia (AFP) –
México espera que el próximo gobierno estadounidense aborde el tema migratorio con su país de manera realista, sin tratar de soslayarlo, afirmó este lunes el ministro mexicano de Desarrollo Social, Ernesto Cordero Arroyo, en Biarritz (suroeste de Francia).

“Es muy importante que el nuevo gobierno de Estados Unidos entienda que el tema migratorio es un tema que va a seguir ahí y que es importante resolverlo de manera realista y no tratar de tapar el sol con un dedo”, comentó el ministro mexicano, que participa en el Foro de Biarritz entre Europa y Latinoamérica como representante del presidente Rafael Calderón.

El tema migratorio en México tiene que ver más con Estados Unidos que con Europa, precisó Cordero Arroyo, quien consideró necesario partir de la base de que hay un “complemento natural” entre el país de origen y el de destino de los emigrantes.

“Ellos tienen el capital y nosotros los trabajadores”, indicó, destacando también el aporte que hacen los profesionales y los empresarios mexicanos a la riqueza de sus vecinos del norte.

“Esto habrá que abordarlo de manera ordenada, de manera justa y transparente para establecer un flujo migratorio en los términos de seguridad” y sobre todo que genere prosperidad tanto en Estados Unidos como en México, manifestó.

El ministro mexicano señaló también que su gobierno estaba muy pendiente de las repercusiones que pueda tener la crisis financiera y económica en Estados Unidos ante un hipotético retorno de los mexicanos que pudiesen quedar desocupados y una disminución de las remesas en dinero que éstos envían a sus familiares.

El gobierno mexicano ha decidido destinar fondos importantes para financiar proyectos productivos en México, tanto para los que regresen como para los que se queden en Estados Unidos y continúen enviando remesas, aseguró.

También se refirió a los emigrantes centroamericanos que usan México como país de tránsito hacia Estados Unidos porque podrían formar parte de este eventual reflujo hacia sus lugares de origen.

Cordero Arroyo dijo que en la eventualidad de que éstos se quedaran en México, en espera de una mejora de la situación en Estados Unidos, serían bien recibidos.

Del mismo modo puntualizó que en la actualidad ya se podía garantizar a estos inmigrantes las condiciones de seguridad y de respeto de los derechos humanos necesarias a su paso hacia sus países de origen.

En el ámbito de las relaciones bilaterales entre México y Estados Unidos el ministro subrayó otro problema común: el narcotráfico.

“Esta es una verdadera guerra contra el narcotráfico que está librando México” y “esta batalla la tenemos que dar juntos, a ambos lados de la frontera”, precisó.

Consideró imprescindible que Estados Unidos entienda que el narcotráfico no es sólo un problema de producción y trasiego, sino también de consumo.

Cordero Arroyo recordó asimismo que el armamento y los medios logísticos utilizados por el narcotráfico provenían de Estados Unidos. “Hay que tener fronteras muy libres para el comercio y la migración de personas pero muy seguras contra las armas y el dinero del crimen”, concluyó.

Más de 70 responsables políticos, económicos y universitarios analizan desde este lunes en Biarritz el estado de las relaciones entre la Unión Europea (UE) y América Latina.