Pocas modificaciones esperan los latinos 

Prensa Libre, 02-11-2008

A62 horas de que sea elegido el nuevo presidente de uno de los países más influyentes del planeta, prevalece entre los latinos residentes en EE. UU., principalmente guatemaltecos, la incertidumbre, desconfianza y falta de interés por los dos candidatos a la Presidencia, quienes se han olvidado por completo de los inmigrantes.

A pesar de ello, la mayoría de connacionales que tienen derecho al sufragio acudirán a las urnas el martes, a sabiendas de que ninguno de los dos candidatos a la Presidencia abrirá el campo para una reforma migratoria, al menos no en los primeros dos años de gobierno.

Durante las últimas etapas de la contienda electoral, ni Barack Obama —candidato del Partido Demócrata— ni John McCain —del Partido Republicano— han querido dar su brazo a torcer frente a la comunidad migrante.

Un sondeo que Prensa Libre efectuó con analistas guatemaltecos y líderes de migrantes evidencia que, aunque la tendencia apunta a que Obama va a ganar, a pesar de que el Partido Demócrata se ha mostrado menos proclive a las restricciones migratorias, los guatemaltecos afincados en EE. UU. se sienten desesperanzados.

Los recursos que han utilizado ambos candidatos presidenciales para ganar votos latinos han sido superficiales y puramente electoralistas, como la carta que envió Hillary Clinton a un diario mexicano, en la que habla de una reforma migratoria, o la propuesta de McCain por el mismo tema, o el arranque artístico de Obama cuando interpretó México lindo y querido.

Una encuesta reciente que la organización Gallup hizo en Latinoamérica revela que el 40 por ciento de los latinos se inclina por Obama; sin embargo, el sondeo también establece que al 50 por ciento de los encuestados ni le va ni le viene quién gane las elecciones. La razón probable es que los temas de política exterior de beneficio para Latinoamérica han estado prácticamente ausentes en los debates electorales.

“EE. UU. está preocupado únicamente por encontrar una salida a su propia recesión económica, así que, en cuanto a política exterior, no habrá ningún cambio significativo”, afirmó César García, economista guatemalteco. Añadió que EE. UU. no tiene interés en Centroamérica, y mucho menos en Guatemala.

Según datos de organizaciones de migrantes, existen al menos 46 millones de latinos en EE. UU., y los guatemaltecos suman 1.6 millones, aproximadamente.

Gallup pronosticó que 29 por ciento de los connacionales que residen en EE. UU. tienen pensado votar por Obama, mientras que 11 por ciento lo haría por McCain.

“La tendencia entre los guatemaltecos indica que va a ganar Obama, debido a que se pretende castigar con el voto las políticas republicanas antiinmigrantes”, aseveró Heydi de Mata, directora de Ciencias Políticas de la Universidad de San Carlos.

Los analistas sostienen también que existe gran desconocimiento entre guatemaltecos e inmigrantes sobre los programas de gobierno de ambos candidatos, pero que la tendencia es apostar por un cambio ideológico, por mínimo que sea.

“Lo único que conocen son las diferencias mínimas entre una tendencia demócrata y una republicana, pero existe más afinidad con los demócratas”, indicó Álvaro Caballeros, de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso).

García se lamentó de que los migrantes no estén bien informados, ya que “se dejan guiar por ofertas electorales, igual como sucede en las elecciones de Guatemala”. “Lo que está claro es que tanto Obama como McCain continuarán con las redadas y deportaciones masivas”, añadió.

Los expertos coincidieron en que la política exterior de la campaña electoral se ha centrado en las guerras de Afganistán e Iraq, las preocupaciones expansionistas de Rusia y el crecimiento económico de China y América del Sur.

García explicó que debido a la segregación racial, los latinos y los afroestadounidenses le apuestan a Obama. “Estas comunidades simpatizan más con un candidato que también ha sido segregado; por ello la mayoría de hispanos y afroestadounidenses votará por Barack Obama”, expresó.

El riesgo es si los estadounidenses blancos también se dejarán llevar por la cuestión racial, lo que a última hora podría inclinar el voto hacia McCain.

El racismo en EE. UU. aún está fuertemente enraizado en algunos sectores sociales, llegando a extremos como el de la semana pasada, cuando dos jóvenes blancos intentaron perpetrar un atentado contra Obama.

Un inmigrante que labora en el campo de construcción en Nueva Orleans expuso que sus amigos guatemaltecos se inclinan por Obama, pero la mayoría basa su opinión en la de otros estadounidenses o en lo que dicen los medios de comunicación sobre ambos presidenciables.

“Aquí hay dos corrientes: hay gente a la que no le interesan los papeles, pues solo desea trabajar, hacer dinero y marcharse, y otros que desean quedarse y obtener la legalidad”, expresó el connacional. “Quede quien quede, solo pedimos que detenga las redadas y que nos dejen trabajar en paz, pues producimos para su país”, añadió.

Las organizaciones de migrantes se han concentrado en motivar a las comunidades guatemaltecas, en particular, y a la latina, en general, para que ejerzan su derecho al voto, pese a las pocas expectativas de cambio.

“El voto latino será determinante en algunos estados como Arizona, Nuevo México, California y Florida, y por ello es importante que guatemaltecos y latinos asistan a las urnas”, aseveró Marlon González, presidente de la Coalición de Inmigrantes Guatemaltecos (Conguate).

Caballeros manifestó que se debe motivar a los guatemaltecos a votar, ya que les falta cultura de participación cívica. “A muchos inmigrantes no les interesa votar, sino trabajar para sobrevivir y enviar remesas a sus familiares”, puntualizó.

El presidente de Conguate afirmó que varias delegaciones de líderes de migrantes en Florida asistirán a las mesas de votación, para asegurarse de que los votos latinos se registren debidamente, ya que en el sufragio anticipado se han encontrado máquinas que no funcionaban como es debido.

“No queremos que suceda lo que ocurrió en el 2000, cuando George W. Bush le ganó a Albert Arnold Gore por 500 votos, pero se habían perdido 19 mil votos en Florida que iban a favor de Al Gore”, expuso González.

“Hay decepción porque ningún candidato resolverá la situación migratoria, pero también hay gran expectativa, pues los estadounidenses dicen que los latinos vamos a marcar la diferencia, porque cada vez somos más los que tenemos derecho al voto”, comentó Julio Villaseñor, presidente de SOS Corporación de Inmigración Internacional, en Los Ángeles.

González manifestó que muchos guatemaltecos ya asistieron a votar anticipadamente. Desde Chicago, Carlos Gómez, del Movimiento de Inmigrantes Guatemaltecos, refirió que desde la semana pasada ha observado todos los días entre 20 y 40 latinos votando en las elecciones anticipadas.

Entretanto, los jóvenes latinos que votarán por primera vez prefieren esperar hasta el día oficial de las elecciones, con tal de experimentar la sensación de sufragar junto a los estadounidenses.

Lilian Cruz, guatemalteca de 21 años y quien reside en el norte de Florida, expresó: “El 4 de noviembre vamos a asistir a las urnas desde temprano, para vivir esa nueva experiencia”.

Cruz añadió que los jóvenes guatemaltecos y latinos poseen un pensamiento más liberal, y que por ello se inclinan por Obama.

Pero independientemente de quién gane el 4 de noviembre, a las organizaciones de inmigrantes les tocará seguir cabildeando la reforma migratoria durante los próximos años.

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