El pasado año dejó a A Coruña como el municipio con el mejor saldo migratorio de toda Galicia. La resta de inmigrantes y emigrantes reflejó en A Coruña un balance positivo de 1.539 nuevos residentes, cifra a la que solo se acercó Lugo, con un aumento de 1.363 habitantes más por el mismo concepto.

Pero al margen de las grandes ciudades – entre las que solo en Ferrol tuvieron el año pasado una mayor incidencia las fugas que las llegadas, dejando un saldo negativo de 171 personas – , destacan los casos de Arteixo y Ames como los mayores exponentes de la emigración interna. Su saldo migratorio fue en el caso del municipio del área de A Coruña de 1.065 habitantes más llegados en el 2007 que los que la abandonaron, mientras que en el municipio que crece a la sombra de Santiago el balance fue de 1.039.

Inmigración interior

De los 2.299 inmigrantes que recibió Arteixo, el año pasado 1.410 llegaron de la provincia de A Coruña, de los que a su vez 981 tenían su domicilio anteriormente en la misma comarca coruñesa. En el caso de Ames la situación es similar, ya que de sus 2.451 nuevos vecinos 1.375 procedían de la provincia y 921 de la misma comarca compostelana.

Narón (728 inmigrantes más que emigrantes en el 2007), Culleredo (690), Oleiros (667), Vilagarcía (541), Carballo (537), Sada (460), Salvaterra (427) y O Porriño (401) dibujan los trazos de la descentralización en Galicia.