Rafael Ribó ve en la futura Ley de Educación de Cataluña una herramienta básica para luchar contra la separación en las aulas El Síndic de Greuges, Rafael Ribó, calificó ayer de «insuficientes» las medidas que ha tomado el Departament d’Educació de la Generalitat para afrontar la segregación escolar de las aulas catalanas. Según informó ayer Europa Press, el Síndic advirtió en una comparecencia al Parlament de que existen suficientes instrumentos de política educativa para afrontar la segregación en Cataluña, por lo que consideró que las administraciones educativas «infrautilizan» el marco normativo actual. Ribó se refirió a la segregación escolar como un «tema de país», y afirmó que «Cataluña se juega el futuro de la cohesión social en él». La demanda de Ribó llega una semana después de que el conseller Ernest Maragall admitiese ante el Parlament que determinadas localidades vivían con especial crudeza esta situación.

La futura Ley de Educación de Cataluña (LEC) es, según Ribó, uno de les instrumentos claves para afrontar la situación «creciente» que se vive en los centros educativos catalanes, por lo que animó al Departament d’Educació a que lidere una batería de medidas a partir de este proyecto de ley. En ese sentido, Ribó remarcó el papel de corresponsabilización que según él tienen que jugar los ayuntamientos, a los que la LEC aumentará sus competencias en materia educativa. Así mismo, el Síndic animó al Govern a definir al máximo la función de las administraciones locales y a darles los instrumentos necesarios para que puedan actuar con eficiencia.

Otra de las medidas que apuntó el Síndic como posible solución, fue la zonificación, es decir, la posibilidad de que un estudiante extranjero pueda ir a un centro que no sea de su barrio, pero con menor porcentaje de inmigración. A la propuesta, el diputado de ERC Josep Maria Freixenet, añadió que las oficinas de escolarización municipal debían convertirse en un elemento útil para evitar la segregación. La popular Carina Mejías, por su parte, atribuyó el problema de la segregación a la «falta de inversión educativa».En ese sentido, la diputada ecosocialista Mercè Civit, se refirió al Pacto Nacional por la Educación como herramienta contra la segregación.

El Síndic reconoció que existen políticas muy desiguales en los fraudes de matriculación, por lo que pidió a las administraciones de educación un «mayor compromiso político en las irregularidades de admisión a las escuelas».

La polémica de la segregación escolar entró en mayo al Parlament, cuando Ribó presentó el informe «La segregación en Cataluña». El documento establecía que el 35% de los estudiantes de secundaria y casi la mitad de los alumnos de primaria estaban segregados en Cataluña. Además, el informe apuntaba a un aumento en estos últimos años de la diferenciación en los centros de primaria.El Síndic ya instó en mayo al conseller de Educació a que realizara un esfuerzo a medio y largo plazo para combatir los problemas del sector, y ayer redobló sus críticas ante lo que entiende que es una respuesta insatisfactoria.