400 policías especiales italianos, enviados a Caserta para evitar más ataques a inmigrantes

El Gobierno cree que la mafia napolitana, la Camorra, asesinó a los seis africanos

Las Provincias, AGENCIAS, 22-09-2008

El Ministerio de Interior ha decidido enviar a 400 policías “altamente especializados” a la provincia sureña de Caserta, tras los asesinatos de seis inmigrantes africanos y de un italiano a manos de la Camorra, la mafia napolitana, según informó ese departamento del Gobierno italiano.

Interior, en un comunicado, manifestó que tras una “profunda” evaluación de lo sucedido el pasado jueves con los asesinatos, y después, con los actos de vandalismo protagonizado por inmigrantes, ha decidido “intensificar el control del territorio y golpear duramente a la criminalidad organizada”.

El Gobierno pretende localizar cuanto antes a los autores de los asesinatos y la captura de los mafiosos prófugos de la justicia.

El Ministerio de Interior añadió que pondrá en marcha los procedimientos para expulsar “con urgencia” a los inmigrantes clandestinos implicados en actividades criminales.

A últimas horas del día 18 seis inmigrantes africanos fueron asesinados en Castelvolturno, en la provincia sureña de Caserta, cercana a Nápoles, y otro resultó gravemente herido, tras un tiroteo presuntamente organizado por el clan de la Camorra de los Casalesi, que controla las actividades ilegales de la zona.

Tres personas, armadas con metralletas y pistolas, dispararon desde un coche 130 tiros contra una tienda de tejidos étnicos en la que se encontraban los inmigrantes, originarios de Ghana, Togo, Liberia y Nigeria. Para los investigadores se trata de un ajuste de cuentas relacionado con el tráfico de drogas.

Una de las hipótesis que sostienen los investigadores es que después de que los Casalesi aumentaran la cuota que los inmigrantes debían pagarles para permitirles continuar con el tráfico de drogas, éstos se negaron.

La policía, a la espera de que los análisis de balística confirmen sus hipótesis, apunta que los responsables del séxtuple homicidio también podrían haber asesinado también ese mismo día, siempre en relación a un caso de tráfico de drogas, a Antonio Celiento, de 53 años, dueño de un local de videojuegos.

La Dirección antimafia indicó que estos asesinatos forman parte de una estrategia de matanzas que la Camorra está llevando a cabo en la zona contra todos aquellos que desafían su poder. En protesta por los asesinatos, amigos y parientes de los asesinados causaron el viernes graves incidentes en Castelvolturno.

Los inmigrantes, armados con palos, se concentraron en la calle donde fueron asesinados los africanos e interrumpieron el tráfico en protesta por lo que consideraron “un acto de racismo”.

Según los manifestantes, los asesinados no tenían ninguna relación con el mundo de la droga o con la Camorra y se quejaron de que se les criminaliza en la zona sólo por el color de su piel.

Algunos de los participantes en la protesta rompieron escaparates y volcaron coches, a la vez que increparon a los policías y les lanzaron diferentes objetos.

Interior no descarta estudiar que, además de en las ciudades, los militares que patrullan las calles puedan ser desplazados a otras zonas.

Texto en la fuente original
(Puede haber caducado)