Los últimos informes dejan en evidencia el fracaso del sistema educativo de Cataluña

El Mundo, DANIEL G. SASTRE, 22-09-2008

La incapacidad de integrar a los inmigrantes y el abismo entre pública y privada, principales lagunas Los datos conocidos en la última semana han dado un golpe durísimo al sistema educativo catalán. Como se venía anunciando en algunos foros, el modelo no ha sido capaz de afrontar con diligencia los retos de la nueva sociedad. Dos grandes lagunas ennegrecen aún más los pobres resultados que arroja el prestigioso informe Pisa sobre la situación de la educación en 2006: la incapacidad de integrar a los inmigrantes y la enorme distancia entre la red privada de centros y la pública.


Un informe de la Fundación Jaume Bofill desmenuza los resultados y es una fuente inagotable de titulares. Puede decirse, por ejemplo, que a tenor de los datos los inmigrantes que viven en Cataluña son los peores estudiantes del mundo desarrollado. Tampoco es que los nativos sobresalgan, pero es que el nivel de los recién llegados está bajo mínimos.


Esta vez, ni siquiera la comparación con España podrá consolar a los que defienden el sistema catalán. Aunque Cataluña es «uno de los países de la muestra con mayor presencia de alumnado no nativo», el informe subraya que hay mayor proporción en el resto de España (un 38%) o en Italia (un 35%), y sus resultados son mejores. «El sistema educativo catalán combina baja excelencia con una gran desigualdad de oportunidades entre grupos étnicos», resume.


Tanto en ciencias como en lectura los escolares catalanes nacidos en España, que están en el furgón de cola de los países de la OCDE, sacan mucha mejor nota que los alumnos inmigrantes.


El otro gran agujero negro es la gran diferencia que existe entre los centros públicos y los privados. El informe señala que «son muy elevadas» tanto en ciencias como en matemáticas y comprensión lectora. «Entre los territorios donde hay una presencia significativa del sector privado, Cataluña es el que presenta una mayor desigualdad de resultados entre redes», continúa.


En efecto, los alumnos de centros privados tienen resultados superiores en un 45% a los de los públicos. El conjunto de España (35%) no está mucho mejor, aún a años luz de sitios como Holanda, donde sólo hay un 3% de diferencia, o de Corea y Hong Kong, donde los escolares de la pública son más brillantes que los de la privada. «Cataluña no consigue compensar las desigualdades sociales», dice el informe.


El conseller d’Educació, Ernest Maragall, descalificó enseguida los resultados del informe, calificándolo de «inútil» y «desfasado», porque se refiere a la situación en 2006.


Sin embargo, José Domingo, diputado de Ciutadans, hizo hincapié en la diferencia entre los inmigrantes que viven en Cataluña y en el resto de España, y aseguró que, al menos en el caso de los sudamericanos, «el problema tiene que ver con el modelo lingüístico» de inmersión en catalán. Además, Domingo criticó que la Fundación Jaume Bofill no entre a analizar los resultados en función de la lengua de los alumnos aun teniendo esos datos, como sí ha hecho otros años.

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