Investigan si el presunto asesino de Torre Pacheco tiene cómplices

El ecuatoriano de 28 años detenido como supuesto autor del crimen frecuentaba los mismos ambientes que la mujer a la que violaron y prendieron fuego

La Verdad, J. A. GONZÁLEZ / A. RUBIO, 19-09-2008

Los investigadores lo tienen claro: cuando hay muchos sospechosos, se hace muy complicado descartar las pistas falsas, aclarar lo ocurrido y dar con el asesino o los asesinos. Pero es cuestión de tiempo. Cuando la lista se reduce y se le echa el lazo a un presunto criminal, es más fácil lograr que cante si actuó con alguien más. Puestos a pagar con la cárcel, pocos quieren cargar en solitario con las culpas de más de uno. Con esta filosofía y varios meses manejando la hipótesis de que varias personas pudieron participar en el crimen, la Guardia Civil prosiguió ayer la investigación y el interrogatorio a Juan Carlos G. T., el ecuatoriano de 28 años detenido el miércoles por su supuesta implicación en la muerte en marzo de María Ángeles Moreno Sánchez, la vecina de Torre Pacheco que fue violada y cuyo cadáver carbonizado abandonaron en una finca agrícola de La Palma (Cartagena).

Los agentes de la Policía Judicial trabajan con la posibilidad de que fueran al menos dos las personas que participaron en el brutal asesinato. Según fuentes de la investigación, las pesquisas practicadas hasta el momento indican que a la víctima (que tenía 29 años, estaba separada y tenía dos hijos pequeños), no le quitaron la vida en el mismo lugar donde un capataz agrícola halló su cadáver en la mañana de Sábado Santo.

Según esta conjetura, el cuerpo de la mujer fue trasladado en un vehículo hasta la zona de Las Barracas, donde le prendieron fuego junto a una vivienda abandonada (en lugar no visible desde la carretera comarcal que une Torre Pacheco y La Palma) y un bancal de alcachofas.

Que sigan buscando

En todo caso, va a ser crucial la declaración que preste ante el juez el joven ecuatoriano arrestado por la Policía Judicial. Juan Carlos G. T., que permaneció ayer durante todo el día en dependencias policiales, puede ser puesto a disposición del juzgado de guardia de Cartagena hoy o mañana.

Al parecer, pocos días después del hallazgo del cadáver, el joven relató a los agentes que un magrebí que mantenía relaciones sentimentales con la víctima podía estar implicado en el crimen. No obstante, el magrebí se presentó por voluntad propia ante la Benemérita para colaborar con los agentes. No se adoptó ninguna medida contra él.

En Torre Pacheco, algunos vecinos afirmaron que el ecuatoriano era cliente habitual de un bar que frecuentaba María Ángeles y está a pocos metros de la casa de la víctima. Entre los vecinos de la joven, la noticia del arresto (adelantada ayer en exclusiva por La Verdad) despertó reacciones muy diversas, sobre todo de indignación. Todos trataban de atar cabos para saber si conocían al detenido.

Muchos especulaban con la idea de que se trataba de un joven ecuatoriano que frecuentaba el bar del barrio donde vivía María Ángeles Moreno. Aunque, precisamente en ese establecimiento no quisieron hacer declaraciones.

Muy cerca del bar y la casa de la familia de Mari Ángeles, la dueña de la peluquería D´Laura Laura Tomás, recordaba entristecida: «Venía a peinarse con su madre y siempre me decía que no le cortara demasiado el pelo. Era muy buena zagala».

Otro vecino, José Ruiz, mostraba su enfado, porque dijo no entender «que tarden tanto tiempo en encontrar a un presunto culpable y, sin embargo, al alcalde de nuestro pueblo, sin tener pruebas suficientes, lo metan en la cárcel».

Javier Paredes sólo quiere «que se haga justicia, porque hay una familia que ha sufrido mucho» y las detenciones «se estaban demorando demasiado». Y José Ángel Saura dijo estar seguro de que «hay más de una persona implicada, porque lo que le hicieron a esa chica es imposible que lo haga uno solo» y pidió que sigan buscando «a todos los culpables».

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