BARCELONA. Los Mossos d´Esquadra ya han detenido a cinco jovenes skinheads de ideología neonazi acusados del presunto apuñalamiento a un menor de edad, de estética antifascista, el pasado día 6 de septiembre en al parada de Urquinaona del Metro de Barcelona. Todos los arrestados, cuatro de ellos menores de edad, ya han ingresado en centros penitenciarios.
El día de los hechos, Rubén, de 16 años y vestido con estética antifascista se encontraba en el andén del Metro, concretamente en la Línea 4 en la estación de Urquinaona con una amiga, de origen sudamericano, y su hermano de ocho años.
Al ver que los cinco neonazis iban hacia la escalera del otro andén, Rubén dijo a su amiga que se marchara con su hermano para que no tuvieran problemas, ya que presentía que los ultraderechistas querían ir hasta su andén para agredirle, según manifestaron fuentes policiales.
Al llegar junto al menor, uno de los agresores sacó un punzón y agredió al menor, que sufrió heridas en la cara, el hombro y el abdomen, cerca de las costillas. La chica y el hermano, que presenciaron la agresión, no tuvieron ningún problema con los agresores que huyeron dejando a Rubén tendido en el andén, siendo asistido momentos después por un empleado del Metro.
Según fuentes del Hospital Clínic, donde fue ingresada la víctima no se tuvo que intervenir quirúrgicamente ya que solo fue necesario un drenaje.
Detenciones en cadena
La División de Información de los Mossos d´Esquadra investigó los hechos y pocos días después, el miércoles, fue detenido el único mayor de edad, Mario F. T., de 18 años, vecino de Barcelona y de nacionalidad española que fue arrestado en la capital catalana. Tras pasar a disposición del Juzgado de Instrucción número 19 de Barcelona, ingresó en prisión por tentativa de homicidio.
Dos días después, también en la capital catalana, fue arrestado un menor de 16 años también vecino de la ciudad. El mismo día, quedaban arrestados dos menores de 16 y 17 años en Pallejà (Barcelona) donde residen y otro de 17 y vecino de Palafrugell (Girona). Todos de nacionalidad española. La Fiscalía de menores se hizo responsable de los cuatro menores y el juez dictó su ingreso en un centro de internamiento juvenil, también por tentativa de homicidio. La autoría material de la agresión se intentará determinar durante la instrucción judicial de la causa.
Manifestación de repulsa
El día 10 de septiembre, amigos y gente cercana a colectivos antifascistas se congregaron en la Plaça de Sant Jaume de Barcelona para protestar por las agresiones fascistas y particularmente por la agresión que había sufrido Ruben días antes en el Metro.
La manifestación, que congregó a unas 200 personas, llegó a la Plaza de Urquinaona sin más incidentes con un espectacular desplegamiento de los Mossos d´Esquadra, lo que generó mucha expectación entre los turistas y viandantes tanto por la gran presencia de furgones policiales y las pertinentes formaciones antidisturbios como por las «pintas» de los asistentes de estética claramente antisistema y punk. La marcha hasta Urquinaona solo se interrumpió un par de veces cuando los manifestantes se sentaron en el suelo y gritaron consignas contra la violencia neonazi.
La asociación SOS Racismo se ofreció a la familia para llevar a juicio a sus agresores.