Las comunidades gitana y subsahariana participarán en un acto público hoy en Madrid para expresar «conjuntamente» su indignación y repulsa por el asesinato en Roquetas de Mar del senegalés Ousmane Kote. La concentración además, servirá para demostrar que no hay enfrentamientos entre ambos colectivos.

Después de los altercados producidos entre ambos colectivos como consecuencia de la muerte del senegalés, los organizadores del acto pretenden hacer un «llamamiento desde la no violencia» para recuperar la convivencia en el barrio de Las 200 Viviendas «y en toda España». Desde su punto de vista siempre ha habido «buenas relaciones entre gitanos y negros», por lo que este suceso no debería cambiarlas.

En el comunicado, ambos colectivos denuncian que el 95 por ciento de su población «pervive por debajo del umbral de la pobreza, con altos índices de mortalidad infantil, insalubridad y carencia de infraestructuras de habitabilidad, altas tasas de desempleo y explotación laboral».