El pesquero Clot de l’Illot, con base en Santa Pola, ha rescatado a algo más de cien millas de Trípoli, en aguas internacionales, a 49 inmigrantes, entre ellos varias mujeres y niños, y permanece a una milla del puerto de esta ciudad, a la espera de que se autorice el desembarco.

Así lo han confirmado el presidente de la Cofradía de Pescadores de Santa Pola, José Ramón García Fuentes, y José Ruso, padre del patrón del pesquero, Héctor Ruso, quien ha comentado que entre los inmigrantes hay algunos que están en muy mal estado de salud y, de hecho, dos han tenido que ser evacuados en un helicóptero para ser atendidos por personal sanitario.
Autoridades italianas

El rescate se produjo ayer por la mañana, cuando los tripulantes del Clot de l’Illot vieron una patera enganchada a una boya de la embarcación que se utiliza para sujetar las redes de pesca. El pesquero se encontraba en ese momento a algo más de cien millas de Libia y a unas noventa de Malta, en aguas internacionales, y en un primer momento, los tripulantes, once en total, se pusieron en contacto con la patrulla costera italiana de la isla de Lampedusa, por ser la más próxima al lugar.

Según Ruso, las autoridades italianas les dijeron inicialmente que acudirían a socorrer a los inmigrantes, pero sobre las tres de la tarde les informaron de que no lo harían porque “no estaban bajo su jurisdicción”. Los pescadores decidieron entonces subir a bordo a los 49 inmigrantes supervivientes, entre los que hay “5 ó 6 menores y 2 chicas”, y les dieron de comer y beber, ha añadido Ruso, quien ha comentado que “estaban medio muertos” y que, al menos, “habían fallecido diez más”.
Desembarco de inmigrantes

Esta mañana las autoridades libias han autorizado a la embarcación a acercarse a una milla del puerto de Trípoli, donde permanecen desde las 12 del mediodía, a la espera de que se permita el desembarco de los inmigrantes. García Fuentes ha añadido que Salvamento Marítimo y la Embajada española están realizando gestiones para que esto se produzca cuanto antes.

Mientras, el pesquero espera la llegada de una patrullera con escolta, porque algunos de los inmigrantes “están nerviosos y no quieren bajar al puerto”, ha asegurado Ruso. Su hijo, Héctor, de 20 años, salió con el resto de la tripulación del puerto de Santa Pola el pasado 18 de julio para la campaña de la quisquilla, y tenía previsto regresar a principios de septiembre, para las fiestas de la localidad.

Ruso ha advertido de que la tripulación se ha quedado ya sin agua y de que apenas les quedan alimentos, y ha pedido la colaboración de las autoridades españolas para que se solucione cuanto antes esta situación.

El rescate de 49 inmigrantes a unas cien millas de Trípoli (Libia) por parte del pesquero Clot de l’Illot, con base en Santa Pola, es la quinta acción humanitaria de este tipo realizada por naves vinculadas al municipio desde julio de 2006.