Un total de 47 inmigrantes irregulares han sido detenidos por la Guardia Civil, entre la noche del miércoles y la mañana de ayer, después de haber arribado en cinco pateras a las playas de La Manga del Mar Menor, según confirma la Delegación de Gobierno de Murcia . Todos ellos son varones, se encuentran en buen estado de salud y según los primeros datos, son argelinos, sin que haya ningún menor entre ellos.

La Guardia Civil se movilizó hacia las 20.45 horas del jueves, cuando tuvo conocimiento, a través de una llamada del Servicio de Emergencias 112, de que habían sido detectadas dos embarcaciones tipo patera en la playa Matasgordas de La Manga del Mar Menor, en el término de San Javier. Varias dotaciones del cuerpo, así como dos patrullas de la Policía Local, se desplazaron hasta esa zona y localizaron dos embarcaciones, con dos motores fuera de borda, varadas en la mencionada playa. Varias horas más tarde fueron detenidos 12 inmigrantes, que habían salido huyendo en el momento en que saltaron a la playa.

Pasada la medianoche, la Benemérita tuvo conocimiento de otra patera en las inmediaciones de Monte Blanco de La Manga del Mar Menor (Cartagena). Inmediatamente, agentes de los Puestos de Cabo de Palos, San Javier y El Algar, así como una patrulla de la Policía Local, iniciaron un nuevo rastreo y lograron detener a 16 inmigrantes, todos ellos mayores de edad. También fueron localizadas dos embarcaciones más, de unos cuatro metros de eslora, varadas en la playa de El Pedrucho, en San Javier, y fueron arrestados otros 10 inmigrantes .

Eran las cuatro de la madrugada cuando fue detenido otro argelino en las inmediaciones de la Urbanización La Martinique, y dos horas más tarde fueron localizaron otros tres en el paraje Los Triolas de Cabo de Palos.

Finalmente, ayer por la mañana la Guardia Civil, como continuación de la operación, procedió a la detención cinco inmigrantes más en diversas zonas de La Manga, por lo que el total de irregulares interceptados en esas dos jornadas asciende a 47.

La nueva oleada de pateras llevó ayer al diputado por Murcia en el Congreso, Alberto Garre, del PP, a mostrar su preocupación por este fenómeno, que se repite con cierta asiduidad desde hace un año, a la vez que criticó que las costas murcianas «sigan sin estar controladas por el sistema de seguridad SIVE».

Garre recordó que «la Guardia Civil ya apuntó hace cuatro años las costas murcianas como posible nueva vía de tránsito de las mafias, reivindicando desde el Gobierno regional y el PP que se adecuen las costas murcianas con el sistema SIVE para evitar que esto pueda seguir ocurriendo. Sin embargo, en pleno siglo XXI sigue habiendo este tráfico de seres humanos sin que nadie le ponga freno».