Vecinos de Arganzuela denuncian cinco agresiones nazis en dos meses

ABC, ABC | MADRID, 14-08-2008

Las organizaciones políticas, sindicales y ciudadanas que integran la Coordinadora en Defensa de los Servicios Públicos de Arganzuela denunciaron ayer públicamente cinco agresiones de grupos neonazis en el distrito en los últimos dos meses. Para evitar que se repitan, pidieron un mayor control policial.
Los ataques se produjeron mayoritariamente en el Centro Social Ocupado «La Traba», un edificio tomado por «okupas» para aprovecharlo como «alternativa de ocio para la juventud del distrito», según explicó el portavoz de la coordinadora, Manuel Prieto. Tal y como denunciaron, los ultraderechistas llegaron a prenderle fuego.
La serie de actos violentos comenzó el pasado 29 de junio, cuando una mujer inmigrante recibió insultos y ofensas en la parada de Metro de Embajadores, a gritos de «Heil Hitler», «Os vamos a matar» o «El barrio es de los españoles». El 24 de julio, gente del movimiento ultraderechista, según los denunciantes, atacó con piedras el centro «La Traba».
El día 5 de julio, tras una concentración de 300 vecinos en repulsa contra estos hechos, siempre según la versión de la coordinadora, los nazis volvieron a atacar el centro, aunque sin consecuencias gracias a la intervención de los vecinos. Sin embargo, al día siguiente, ocurrió «el incidente más grave», según Prieto. Los agresores prendieron fuego a la puerta principal de «La Traba», «poniendo en peligro a la gente que estaba dentro y un colegio público próximo»
La última agresión tuvo lugar el 30 de julio en los andenes de la estación de Metro de Legazpi, la misma donde murió el año pasado el joven antifascista Carlos Palomino. La víctima, en esta ocasión, fue una integrante del centro «okupa» a la que propinaron insultos y patadas.
Por eso, la coordinadora pidió a la Delegación del Gobierno el aumento de control policial en la zona. «Afortunadamente, hemos detectado en los últimos días que la presencia de patrullas policiales ha aumentado y queremos que la vigilancia se mantenga y, si fuera necesario, incrementarla todavía más», declaró Prieto. «Esperemos que las investigaciones a los autores se lleven hasta el final», manifestó el portavoz, que añadió que «no ha habido ninguna detención».

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