La juez de Vigilancia Penitenciaria visitó el pasado miércoles a los 90 africanos de Tenerife II que estaban en huelga de hambre desde el día 20. Consiguió que al día siguiente abandonaran la protesta todos los internos del módulo I. En la noche del día 30 se unieron cuatro inmigrantes más. Ayer la abandonaron todos.

Al mediodía de ayer quedó desconvocada la huelga de hambre que todavía mantenían 56 presuntos patrones de cayucos, de los 90 que desde el pasado domingo protestaban en el centro penitenciario Tenerife II, argumentando que no eran “delincuentes, sino pescadores y agricultores”, según confirmó la Delegación del Gobierno en Canarias.

La juez de vigilancia penitenciaria visitó el pasado miércoles a los 90 presos africanos que se encontraban en huelga de hambre desde el día 20, como forma de protesta por haber sido encarcelados sin justificación aparente, puesto que ellos se consideran parte de las expediciones clandestinas que han llegado a las costas canarias, pero aseguran que no han sido los responsables de ellas.

Tras esta visita abandonaron la huelga los internos del módulo I, unas 20 personas, pero siguieron adelante los dos módulos restantes, con otros 70 internos más.

Además, en la noche del miércoles se sumaron a la huelga los cuatro africanos que ingresaron en la cárcel tinerfeña ese día, también acusados de ser presuntos patrones.

El subdelegado del Gobierno en Santa Cruz de Tenerife, José Antonio Batista, informó el miércoles que a la protesta se habían sumado unos noventa internos.

Esta información fue adelantada por este periódico en su edición del día 30, donde se precisaba que un grupo de presuntos patrones del módulo de preventivos comenzaron la huelga de hambre por la tarde noche del domingo a la que se fueron sumando otros hasta llegar a los 90. En las instancias de solicitud de la huelga escribían “por razones judiciales”.

En la mañana de ayer todavía eran 57 los que continuaban en huelga de hambre, pero la protesta quedó desconvocada al mediodía.

Tres internos padecieron hipoglucemia a los seis días de permanecer en huelga y tuvieron que ser trasladados a la enfermería.

Cabe recordar que en dos meses han sido 128 los inmigrantes de los cayucos encarcelados en Tenerife, acusados de ser presuntos patrones. Algo inusual hasta ahora. Incluso, la policía señala no sólo a uno, sino a cuatro o cinco personas como patrones de un mismo cayuco. Se trata de los que se encargan de tripular la embarcación y de mantener unas mínimas normas para garantizar una travesía sin problemas, pero puede que no sean los responsables del viaje.

El centro penitenciario tinerfeño ha alcanzado un nuevo récord de internos, con 1.641, cuando esta cárcel fue construida para un máximo de 700 personas.