La llegada de inmigrantes en condiciones infrahumanas a las costas de Canarias también repercute en el resto de comunidades autónomas, entre ellas la valenciana, sobre todo, coincidiendo con el verano. Durante este mes, el número de personas que alcanzaron las islas del archipiélago y fueron derivadas por el Gobierno central a la Comunitat se ha duplicado respecto al mismo periodo de 2007, pasando de los 34 del año pasado a los 64 actuales, según los datos facilitados por la Conselleria de Inmigración, actualizados hasta el pasado viernes.

A lo largo del año, las entidades humanitarias afincadas en la Comunitat han recibido a 364 extranjeros derivados, una cifra que previsiblemente aumentará en agosto. En comparación con los datos registrados en años anteriores, la cantidad no es muy elevada, a falta de que finalice el ejercicio. El año pasado arribaron desde Canarias 1.170 inmigrantes. En cambio, en 2006 se alcanzó el número más alto, con 2.426 traslados de personas hasta la Comunitat.

Este incremento es uno de los argumentos empleados por el conseller Rafael Blasco en la carta enviada esta semana al ministro responsable, Celestino Corbacho, y que está relacionado con la reivindicación de más fondos para las autonomías para poder costear el incremento poblacional derivado de la llegada de inmigrantes.

Alicante ha sido la provincia con más recepciones, con 45 extranjeros acogidos. El resto fueron trasladados a Valencia y ninguno fue enviado a los centros de Castellón. En 2007, en cambio, cuatro inmigrantes fueron acogidos en la citada provincia. En 2007 se produjeron únicamente tres envíos (en cada uno llegaban varios extranjeros), mientras que en el mes actual la cifra se ha multiplicado. En total, han sido ocho los días en los que han llegado inmigrantes, concretamente el 2, 4, 7, 11, 16, 18, 23 y 25.

La consolidación del fenómeno migratorio ha motivado la reacción de las Administraciones, tanto a nivel estatal como autonómico. Por ejemplo, fue el ministro Corbacho el que lanzó la idea de alcanzar un pacto de Estado para la inmigración. Por contra, desde los gobiernos autonómicos e incluso municipales se critica la falta de recursos procedentes de las arcas estatales. Sirve un ejemplo, relacionado con el traslado de ilegales llegados a Canarias. El Gobierno dispone un fondo de Integración de Inmigrantes, que regula las aportaciones anuales a las diferentes comunidades. Se trata de unas cuantías que sirven para el mantenimiento de centros de acogida, en compensación por el envío de extranjeros llegados a otras regiones con una mayor presión migratoria, en concepto de acogida de menores y para sufragar los gastos en materia de educación.

Sin embargo, una de las críticas de la Conselleria de Inmigración hace referencia al escaso aumento de este dinero en los últimos años, que se ha cifrado en un 0,43%, pasando de los 22,7 millones de 2007 a los 22,8 de este año. El conseller Blasco criticó cuando se hizo público el reparto de estas ayudas que la Comunitat ha recibido un incremento residual, mientras que la llegada de inmigrantes a la Comunitat se ha disparado y ya representan el 16,7% del total poblacional.

Ayer, Blasco se posicionó a favor de orquestar un pacto de Estado para la inmigración basado en dos pilares: más ayudas económicas para las regiones receptoras y la transferencia de más competencias a las comunidades autónomas.

El conseller dijo que el “intenso aumento” de la población inmigrante en el último año, las “alarmas de crisis” y el desempleo, “aceleran aún más si cabe la necesidad de alcanzar un pacto”.

Otra de las cuestiones planteadas por el Consell es la necesidad de modificar la Ley de Extranjería para traspasar algunas competencias relacionadas con las políticas de reagrupación familiar, retorno voluntario y permisos de trabajo en el lugar de origen.

La última actualización del padrón de la Comunitat no ha hecho más que confirmar la tendencia. De hecho, la región ha sufrido el aumento de población inmigrante más grande de los últimos tres años. Entre 2007 y 2008 se instalaron 106.122 inmigrantes. Sólo en el periodo comprendido entre 2004 y 2005 se superó este incremento, con 117.000 nuevos vecinos.

La nacionalidad con mayor presencia en la región sigue siendo la británica, que encabeza el ranking durante los últimos años, aunque en los próximos se verá superada por la rumana si se mantiene la progresión actual. Hoy en día hay 134.874 británicos, concentrados sobre todo en Alicante. Por contra, los nuevos vecinos procedentes del país del Este ya suman 127.750 personas. Hay que tener en cuenta que en 2007 la cifra era de 95.648.

El Instituto Nacional de Estadística (INE) publicó la pasada semana las cifras de la Encuesta Nacional de Inmigrantes de 2007, que establece algunas conclusiones llamativas. Por ejemplo, en la Comunitat hay 336.951 viviendas con residentes inmigrantes y la mitad (158.515) carecen de calefacción. Otro dato. Del total de inmigrantes, 155.604 tienen intención de traer familiares a la Comunitat.

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