Ambas nacieron en Africa, donde sufrieron ablación, y hace años que viven en España

BARCELONA. – Dos mujeres han recuperado la sensibilidad de sus genitales a los dos meses de haber sido operadas de una reconstrucción del clítoris en el Instituto Dexeus de Barcelona por el doctor Pere Barri Soldevila, impulsor del Programa de Reconstrucción Genital Post Ablación del centro.

Las dos pacientes, que son inmigrantes de origen africano que residen en España, han conseguido un resultado anatómico de los genitales satisfactorio y han recuperado la sensibilidad del clítoris, aunque aún es pronto para evaluar su respuesta a la estimulación sexual, según ha explicado el Instituto Dexeus en un comunicado.

Ambas sufrieron la ablación en el primer año de su vida en sus países de origen y, posteriormente, se trasladaron a España. Actualmente, otras 10 mujeres han solicitado esta intervención.

La mutilación genital femenina es una costumbre todavía arraigada en muchos países subsaharianos y consiste en eliminar el clítoris de las niñas como ritual de iniciación y entrada a la vida adulta, a la edad de la pubertad, aunque algunas son intervenidas en sus primeros meses de vida.

Se estima que se llevan a cabo unos dos millones de ablaciones anuales en todo el planeta, y según sea parcial o completa, la mujer afectada sufre problemas que van desde la falta de estimulación sexual en la zona afectada a dolor en el coito y desgarros obstétricos en los futuros partos.

Según ha explicado el doctor Barri, antes de una intervención de este tipo, que suele durar alrededor de una hora, es imprescindible una evaluación psicológica y sexual previa a la intervención para confirmar el convencimiento de la mujer y evaluar la calidad de su vida sexual.

El doctor Pere Barri Soldevila también señaló que según el tipo de ablación que se haya hecho, se usa una técnica estándar o una individualizada, aunque la más común no secciona el clítoris de raíz, sino unos dos tercios, por lo que la cirugía recupera el muñón del clítoris restante que queda escondido a nivel de la raíz del pubis.

La operación consiste en eliminar el tejido cicatrizado de la zona mutilada y, para ello, se localiza el muñón del clítoris restante con los nervios residuales implicados en la sensibilidad sexual y se coloca en la parte más exterior posible, que será la definitiva.

El postoperatorio suele ser bastante rápido si no se producen inconvenientes durante la intervención, y el alta se produce a las 24 horas, aunque la paciente debe someterse después a controles quincenales durante los dos primeros meses.