El Gobierno español comparte la aplicación de sanciones a los empleadores de inmigrantes en situación ilegal, según destacó el ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, quien a su llegada al Consejo de Justicia e Interior (JS), que hoy se celebra en Bruselas, aseguró que en la lucha contra la inmigración ilegal no se puede cometer el error de ir exclusivamente a perseguir al ilegal puesto que cuando hay una persona en situación irregular es porque también hay alguien que se está aprovechando de esa circunstancia y eso tiene que ser sancionable.

Corbacho calificó de buen paso que la instaruración de estas sanciones se haga a nivel europeo y acogió positivamente las dos propuestas que hoy debatirán los Veintisiete.

En este sentido, aparte de las sanciones aplicables a los empleadores de mano de obra clandestina, los ministros europeos también abordarán la denominada tarjeta azul cuyo objetivo es atraer a mano de obra cualificada al mercado laboral europeo.

Respecto a esta otra propuesta de directiva, el responsable español de Trabajo e Inmigración subrayó que la Unión Europea (UE) debe reflexionar en una doble dirección.

Los Veintisiete necesitan personal de alta cualificación para competir en un mercado globalizado pero al mismo tiempo, se debe fomentar el regreso o devolver parte del esfuerzo que realizan los países en vías de desarrollo para formar a sus ciudadanos ya que de lo contrario estaríamos condenando a esos países a estar permanentemente en el subdesarrollo, apuntó.

En cuanto al Pacto Europeo de Inmigración y Asilo que hoy presenta formalmente la Presidencia Francesa de la UE segundo semestre de 2008 – , Corbacho insistió en que en recoge, en síntesis, bastante bien lo que había venido siendo la posición española.

El ministro de Trabajo e Inmigración consideró que este plan es un buen paso en el sentido de que va en la dirección de entender el fenómeno de la inmigración desde una visión más integral, más global.

Creo que el pacto tiene un buen contenido y luego tiene lógicamente interpretaciones y tiene el desarrollo en cada país, puntualizó Celestino Corbacho quien no compartió el adjetivo de elegida que la Presidencia Francesa utiliza para hablar de la inmigración que necesita la UE ya que parece que suena a seleccionar solamente aquel que me interesa.

El ministro español de Trabajo e Inmigración defendió que la inmigracion tiene que ser entendida globalmente y siempre tiene que estar ligada al mercado de trabajo por lo que es razonable que si la UE necesita trabajo más cualificado este tipo de personas supongan el grueso de los flujos aunque sin excluir la posibilidad de que puedan venir trabajadores menos cualificados.