Llevan horas de pie, bajo el sol, aguardando su turno. Centenares de nigerianos esperan desde ayer en el colegio Jesuitas de Valencia para poder conseguir el certificado de antecedentes penales que les permita regularizar su situación en España.

El centro escolar le ha cedido parte de las instalaciones a la asociación de nigerianos de la Comunitat Valenciana, a través de un contrato de alquiler. Hasta allí se han desplazado policías y funcionarios del país africano que hasta el viernes tomarán huellas dactilares para poder expedir el certificado.

Esta iniciativa de las autoridades de Nigeria ha hecho que miles de compatriotas se hayan acercado hasta las instalaciones de Pío XII. No sólo de Valencia sino de otros puntos de la Comunitat. Las inmediaciones de Jesuitas fueron ayer un hervidero de inmigrantes.

Las colas ayer fueron inevitables. “Llevamos desde las seis de la mañana. Ya tenemos turno pero seguro que antes de las cinco de la tarde no nos toca”, apuntó un joven nigeriano, que reside en la ciudad desde hace tres años.

Cientos de personas invadieron el recinto cuando abrió sus puertas. Las mujeres tuvieron preferencia para coger turno. Algunos habían pasado la noche en las inmediaciones. El flujo de nigerianos fue continuo. “Sólo hoy – por ayer – pasarán unas 1.000 personas”, apuntó Charles Ayo, presidente de la Asociación de Nigerianos de la Comunitat Valenciana.

Muchos aparcaron sus coches en el interior del recinto, que estaba repleto de bolsas y de basuras. Otros se instalaron en las palmeras del centro del patio para buscar la sombra.

Según fuentes del colegio, la situación les desbordó, ya que no preveían que el número de nigerianos iba a ser tan alto y tampoco había una organización adecuada. Para evitar cualquier tipo de altercado fruto de la larga espera, dos coches de Policía Nacional permanecieron en el centro durante toda la jornada.

Aunque los inmigrantes tienen hasta el viernes para obtener este certificado, Ayo afirmó que se intentará alargar el proceso hasta el sábado para atender a todos. Este servicio ya se ha prestado en Barcelona, donde miles de nigerianos legalizaron su situación. Tras Valencia, los funcionarios nigerianos tienen previsto desplazarse a varios puntos de España para expedir este documento como Sevilla y las Palmas de Gran Canaria.

Desde Nigeria se dispuso este dispositivo porque este documento, necesario para obtener el permiso de trabajo, no podía ser expedido en Valencia y los nigerianos se veían obligados a volver a su país en situación de ilegalidad para conseguirlo. Estos certificados “serán enviados a la embajada en Lagos, los tramitará el Ministerio de Asuntos Exteriores y luego los expedientes serán devueltos a Madrid, donde se procederá a repartirlos”, explicó Ayo.