Los seis inmigrantes indios apostados ante la Delegación del Gobierno en Melilla desde el pasado 12 de mayo han solicitado una solución humanitaria ante una situación que han calificado como «desesperada».

A punto de cumplirse dos meses desde que decidieron acampar en la Plaza de España en la ciudad, los seis inmigrantes procedentes de Cachemira piden su traslado a la península. Según señaló ayer un portavoz de los asiáticos, están a la espera de que haya un contacto con algún representante de la Delegación del Gobierno, pero matizan que su intención no pasa por retornar al Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI), tal y como se les exige.

Los seis indios subsisten gracias a la solidaridad de los melillenses que les llevan comida, así como de algunas asociaciones y entidades.

No obstante, temen que el tiempo y la rutina les acabe convirtiendo en «olvidados», algo que pretenden evitar a raíz de campañas de recogidas de firmas que, bien de forma directa o a través de organizaciones no gubernamentales, pretenden llevar a cabo.

Cansancio acumulado

«No podemos volver a la India. Ése sería nuestro final», dijo el portavoz de los seis inmigrantes, en cuyos rostros se empieza a reflejar el cansancio acumulado a los largo de los más de 50 días durmiendo en la calle.