El secretario general de Unió Democràtica de Catalunya (UDC), Josep Maria Pelegrí, reclamó ayer que «con la misma contundencia que se exigen derechos para los inmigrantes, es preciso exigir deberes». Pelegrí realizó estas manifestaciones en la escuela de verano de la Unió de Joves, la rama juvenil de UDC.

El dirigente democristiano advirtió «a los partidos que defienden determinados derechos para los inmigrantes, como el derecho a voto en las próximas municipales, qye tengan en cuenta que también es necesario elaborar un listado de deberes que sean exigidos con la misma firmeza y, al mismo tiempo, que se otorgan los derechos».Si una cosa se desvincula de la otra, según Pelegrí, «cometeríamos una injusticia».

El secretario general de Unió compartió la opinión del ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, en la cuestión del reagrupamiento familiar y se mostró partidario de de limitar este derecho a la «familia nuclear», es decir, a padres e hijos, aunque excepcionalmente se pueden añadir los abuelos. Pelegrí pidió al Govern de la Generalitat que se pronuncie sobre el tema y que deje clara su posición sobre la cuestión. «Queremos saber si el Govern es partidario en su conjunto – y si lo son las tres fuerzas políticas que le dan apoyo – del reagrupamiento circunscrito a la familia nuclear o de aplicarlo a cualquier tipo de parentesco».

Por último, el dirigente de Unió criticó la posición del ejecutivo catalán sobre la inmigración y señaló que, de hecho, el gabinete que preside Montilla no tiene una postura oficial sobre el tema porque «no tiene modelo en materia de inmigración. Las dificultades en el Tripartito para tener uan postura única, sus contradicciones y el retraso en la elaboración del pacto nacional sobre inmigración demuestran su incapacidad para afrontar esta realidad y darl soluciones».