Las autoridades migratorias mexicanas detuvieron ayer en Chiapas a 17 indocumentados cubanos en tres operaciones. Fuentes del Instituto Nacional de Migración (INM) informaron de que dos grupos de inmigrantes, uno de seis personas y otro de siete, fueron descubiertos a bordo de autobuses públicos cuando cruzaban un puesto de revisión en el norte del estado.

Los indocumentados explicaron que habían salido hacía seis días en balsa de la isla de La Juventud, en el suroeste de Cuba. Habían arribado cerca de Cancún, en el Estado mexicano de Quintana Roo, uno de los puntos habituales de entrada de la inmigración clandestina que proviene del Caribe. De ahí partieron en autobús con la intención de llegar a Estados Unidos, dijeron.

Los indocumentados serán trasladados a Tapachula, en la frontera de México con Guatemala, a la espera de su deportación. Un tercer grupo de cuatro personas, que se encuentra ahora en las dependencias del INM en Tuxtla Gutiérrez, fue interceptado en un autobús de pasajeros en un puesto de control.

La cada vez mayor presencia de cubanos que entran ilegalmente en México ha puesto en guardia a las autoridades mexicanas, especialmente tras el secuestro el pasado 12 de junio de un grupo de 33 personas perpetrado por un comando armado cuando eran trasladados a dependencias del INM.

El suceso ocurrió cuando los inmigrantes eran llevados en un autobús hacia la estación migratoria de Tapachula, momento en que un comando armado detuvo el autobús y se llevó a los indocumentados. Posteriormente, dieciocho cubanos de ese grupo fueron localizados en Estados Unidos sanos y salvos.

Asimismo, el INM detuvo esta semana a otros ocho cubanos que se encontraban sin papeles en Chiapas.

La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) emitió recientemente un comunicado a propósito de la mayor presencia de cubanos en situación irregular en el sur de México. El texto recalca que hay que renovar el marco jurídico sobre tráfico de personas.

El Gobierno de México comenzó el miércoles a realizar “exámenes de confianza” a los funcionarios del INM y anunció la destitución de dos altos responsables en el caribeño estado de Quintana Roo tras la fuga del grupo de cubanos ocurrida este mes.