La policía ha detenido a un sospechoso de la muerte de una madre y su hijo Pocas horas después de producirse el asesinato de una madre y su hijo en Tortosa (Tarragona), la Policía Nacional detuvo a un joven de 18 años, Antonio G.M., como presunto cómplice de los autores, supuestamente dos hermanos de etnia gitana. Todos los indicios apuntan a que la muerte de ambas personas se produjo durante una operación de compraventa de drogas.

La Policía detuvo ayer por la mañana a un presunto cómplice de los dos supuestos autores materiales de la muerte de la mujer y su hijo. La policía, al cierre de esta edición, continuaba buscando a los dos principales sospechosos, hermanos y de etnia gitana.

Los agentes buscan a esas personas ya identificadas, por su presunta implicación en la muerte de Concepción G.G., de 54 años, por heridas de arma blanca, y su hijo José Manuel S.G., de 28, que recibió un disparo de arma de fuego. Madre e hijo se habían desplazado hasta una vivienda de la capital del Baix Ebre para presuntamente adquirir droga.

La tesis sobre la que trabaja la policía es que sobre las 22 horas del miércoles, los dos hermanos fueron a comprar droga a la casa de las víctimas, también gitanos, situada en la calle Costa de Capellas, y al no ponerse de acuerdo, se fueron para regresar poco después armados con una escopeta y un arma blanca. Los presuntos agresores dispararon entonces al hijo y después acuchillaron a su madre cuando trató de defenderlo. Después de la agresión, los dos hermanos se dieron a la fuga. El joven fallecido llevaba tan sólo una semana fuera de la cárcel y contaba con un abundante historial delictivo.