Asturias, País Vasco y Madrid proponen regular este derecho de cara a las elecciones de 2011 – Avalancha de enmiendas en torno a la regulación de la inmigración ilegal y en contra de la UE Otro debate político que está suscitando decenas de enmiendas en el PSOE, de cara al próximo Congreso Federal, es el relativo al voto de los inmigrantes en las próximas elecciones municipales de 2011.

Según ha podido saber EL MUNDO, al menos tres federaciones socialistas – Asturias, País Vasco y la Comunidad de Madrid – han incorporado enmiendas a la ponencia marco del XXXVII Congreso pidiendo regular el derecho al sufragio de los inmigrantes.

En dichas enmiendas, unas mejor fundamentadas que otras, se pide que en las elecciones municipales el derecho de residencia sea suficiente requisito para votar, independientemente de la nacionalidad de la persona.

Así, en una enmienda de adición de la agrupación Puente de Vallecas de Madrid, se puede leer lo siguiente: «Fomentar un debate para buscar soluciones a los límites legales de concesión del derecho al voto a los inmigrantes en elecciones municipales, dependiente del principio de la reciprocidad, tal como aparece en el artículo 13.2 de la Constitución. Una modificación de este artículo es necesaria para lograr una buena política de integración para todos los inmigrantes […]. El derecho al voto en las elecciones locales debe poder concederse con criterios de residencia, siguiendo los criterios de la ciudadanía cívica de la Comisión Europea, y, por lo tanto, debe ser independiente de la adquisición de nacionalidad española».

Otras enmiendas, a las que ha tenido acceso este diario, son más sencillas en su elaboración, pero en la misma línea. Así, se puede leer en otra enmienda de adición: «El Partido Socialista defiende el derecho al voto de los inmigrantes en las elecciones municipales, para fomentar una mayor participación de los inmigrantes en los órganos de gobierno más cercanos al ciudadano».

Fuentes del PSE informaron a EL MUNDO de que también han incluido enmiendas a este respecto con el objetivo de que los inmigrantes, al menos en las municipales, puedan votar ya en 2011, y que no haya más discriminaciones en este derecho hacia ciudadanos que conviven con nosotros.

En la dirección del PSOE se está absolutamente de acuerdo con esta medida pero, en cualquier caso, su aprobación deberá pasar por un acuerdo previo con el Partido Popular y, además, con el resto de grupos parlamentarios.

Por ello, es posible que se acepten dichas enmiendas, vinculadas a un gran acuerdo político.

Además, hay otro amplio paquete de enmiendas en el PSOE relativo a la política de inmigración, en las que se suscita un rechazo amplio a la directiva de inmigración, apoyada ayer mayoritariamente por la Unión Europea.

Las enmiendas a las que ha tenido acceso este diario son muy diversas – mezclan una política más dura contra la inmigración ilegal con peticiones de respeto para los derechos humanos – , pero la mayoría van en la línea seguida hasta ahora por el Gobierno.

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Caldera y las 5.000 enmiendas

M. S.

MADRID. – Unas 5.000 enmiendas tendrá que ordenar y gestionar Jesús Caldera de cara al próximo Congreso Federal del PSOE. El dirigente socialista comparecerá el próximo martes en rueda de prensa para explicar con detalle el contenido de los principales debates que se abrirán en el partido. Las federaciones socialistas están haciendo llegar – incluso fuera de plazo, aunque se han admitido – sus alegaciones a la ponencia marco durante estos días, y debe ser la dirección federal quien ordene este difícil puzle. Caldera ha sido el encargado de coordinar la ponencia política y, ahora, también deberá dirigir el debate ideológico en el Congreso. El PSOE intentará evitar que se centre la discusión en temas espinosos y que causan profundas divisiones en el partido, como el aborto, la financiación autonómica o la laicidad del Estado. Sin embargo, todo indica que, a falta de debates sobre dirigentes, los socialistas sí entablarán duros debates políticos.