La mayoría eran oriundos de Egipto y habían partido de Libia el pasado día 7 tras pagar entre 300 y 600 euros

Ayer se dio a conocer que el pasado 7 de junio el naufragio de una nave repleta de clandestinos cuyo destino era Italia causó al menos 40 muertos y cerca de un centenar de desaparecidos. La embarcación zozobró cerca de la costa de Zuwarah (Libia), de donde había partido.

A bordo había unas 150 personas y al parecer solo se salvaron un egipcio y un bangladesí. Las autoridades libias ya han recuperado 21 cadáveres. La tragedia fue comunicada el 13 de junio por autoridades de Trípoli a Egipto, ya que en la embarcación había varios ciudadanos de este país. Fuentes de Egipto cifraron en medio centenar los vecinos de Zagazig, en el delta del Nilo, que subieron al barco. Añadieron que cada uno había pagado entre 300 y 600 euros.

Mientras, y a pesar del mal estado del mar, en la isla de Lampedusa, a pocas millas de la costa tunecina, la central operativa de la capitanía de puerto coordina una operación especial en la que participan lanchas de salvamento, que recorren las costas para recuperar las embarcaciones cargadas de clandestinos que intentan llegar a tierra.

Somalíes

Los intentos de desembarco de inmigrantes en las costas de las islas del sur de Italia se están cobrando nuevas víctimas estos días. Las últimas, aún consideradas oficialmente como desaparecidas, son seis inmigrantes somalíes, que desaparecieron el domingo al sur de Malta. Se sabe que entre los náufragos había tres menores.

Las operaciones de salvamento, suspendidas durante la noche, continuaron durante todo el día de ayer sin resultados positivos. Los supervivientes, unas 28 personas, se salvaron gracias a las redes de los atuneros a las que se agarraron como si fueran grandes flotadores y con las que fueron acompañados a los centros de refugiados de Malta.

Estas mismas redes para la pesca de atún habían sido la causa del naufragio de la nave de clandestinos al chocar contra ellas mientras los atuneros faenaban en las aguas del Mediterráneo. En las últimas horas, la Marina de Malta ha rescatado además a otros 56 clandestinos a bordo de dos naves.

Las autoridades italianas no han comunicado el número oficial de naves ni de personas interceptadas en los últimos días, pero solo el pasado domingo fueron siete las embarcaciones apresadas, con 404 personas a bordo, entre ellas ellas varias mujeres embarazadas.

Ayer, fueron dos lanchas con noventa inmigrantes las que llegaron a las costas. En la primera había 46 hombres, todos adultos, mientras que de las 44 personas de la segunda, dieciséis son mujeres y siete, menores de edad.

Protesta de la Liga Norte

El centro de acogida de Lampedusa está en alarma por el alto número de personas hacinadas en sus instalaciones. Las protestas de los habitantes de la isla están encabezadas por la representante de la Liga Norte, Angela Maraventano, que se ha presentado en el muelle vestida con un chador diciendo que quería «un pasaje para Trípoli».

También en la isla de Marettimo, en el archipiélago de las Egadi, fuera de las rutas utilizadas normalmente, la Guardia de Finanza italiana localizó a un total de seis inmigrantes que acababan de desembarcar en la costa.