Efectivos del Cuerpo Nacional de Policia han desmantelado en la barcelonesa localidad de Sabadell un taller ilegal de confección de prendas de vestir en el que eran explotados laboralmente ciudadanos chinos. Los agentes han detenido al dueño del local por un delito contra los derechos de los trabajadores y a 12 empleados por encontrarse en situación irregular en España.

Los arrestados confeccionaban imitaciones de prendas de vestir de conocidas marcas desde hacía años. Los policías están indagando si exportaban el material o lo vendían en mercados ilegales.

Según explicaron fuentes policiales, a mediados del pasado mes de mayo, los investigadores detectaron la existencia de dos locales situados en la calle Gibraltar de la citada población en los que podían estar siendo explotados ciudadanos chinos. Los policías comprobaron en el Servicio de Actividades del Ayuntamiento de Sabadell si constaba alguna licencia de actividad textil en esta dirección y efectivamente constaba un permiso para desarrollar dicha actividad, aunque no había signos externos de que se estuvieran desarrollando esos trabajos. Los agentes iniciaron entonces la vigilancia del local y comprobaron que personas de origen chino entraban y salían del establecimiento cargados con bolsas de plástico que introducían en vehículos. Las investigaciones permitieron demostrar que estos empleados vivían en estos dos locales.

La semana pasada, miembros del Grupo de Operaciones Especiales (GOE) de la Policía, junto a efectivos de la Policía Local de Sabadell y personal de Inspección de Trabajo accedieron a los dos establecimientos. Los agentes encontraron y detuvieron a Jieanhe C., el dueño del establecimiento, y a cinco trabajadores en situación irregular. Posteriormente, fueron arrestados siete empleados más cuando intentaban huir.

En el interior del taller había 63 máquinas industriales de coser, dos máquina de prensar para etiquetaje de ropa y una máquina industrial de cortar prendas. Además, había prendas confeccionadas en los dos locales que imitaban conocidas marcas de ropa, por lo que el dueño podría ser acusado también de un un delito contra la propiedad intelectual. De hecho, ésta es una de las diligencias que están pendientes de practicar los efectivos policiales en colaboración con el juzgado de Sabadell, que ha dirigido las pesquisas y que autorizó la entrada y registro en los dos locales.

Fuentes policiales señalaron que los trabajadores estaban siendo explotados, ya que trabajaban casi todo el día y cobraban un salario mínimo.

Los arrestados tienen edades comprendidas entre los 28 y los 50 años y son todos de nacionalidad china. Al encontrarse en situación irregular – todos menos el dueño de los locales – , se han iniciado los trámites para su repatriación. No será así en el caso del hombre que los explotaba, ya que era el único que tenía regularizados sus papeles.

La operación, bautizada como Gibraltar, ha sido dirigida por efectivos de la Brigada Local de Extranjería y Documentación.