El ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, realizó ayer una visita relámpago a Tenerife que dejó muy poco contenido en uno de los puntos fuertes de la reunión que mantendría con el presidente del Gobierno canario, Paulino Rivero, que hoy se reúne en Madrid con José Luis Rodríguez Zapatero.

El ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, realizó ayer una visita relámpago a Tenerife que dejó muy poco contenido en una de las cuestiones anunciadas como punto fuerte de la reunión de trabajo con el presidente del Gobierno canario, Paulino Rivero.

En la rueda de prensa, ambos mandatarios pusieron de manifiesto “la buena sintonía” y la “plena coincidencia” que existe entre ambos gobiernos (central y autonómico), además de la “buena voluntad para hablar de los temas que preocupan, como son los menores extranjeros no acompañados”. Pero ninguno de los dos concretó nada al respecto.

En relación a los menores, Corbacho recordó que se trata de una competencia autonómica, “pero que el Gobierno de España no puede verlo sólo en clave competencial”. Siguió hablando sin precisar nada y añadió: “Tenemos que buscar el punto de concertación con voluntad de permanencia en el tiempo y no de la coyuntura”.

En este sentido, el responsable de Inmigración abogó por buscar “un marco de acuerdo” entre el Ejecutivo central y el canario para “ir afrontando los temas”.

Lo más concreto que señaló el ministro fue que en los próximos meses se podrán resolver el máximo de asuntos políticos “en este marco de acuerdo”.

El ejemplo que puso es que el presidente Rivero “no puede saber cómo será la evolución de la inmigración en los próximos meses, por ello hay que trabajar en origen y valorar positivamente que en los últimos dos años haya habido una disminución importante en la llegada de cayucos”.

Insistió en que el Gobierno de España “puede hacer mucho y ver cómo es el problema para actuar con garantías”.

Continuó hablando en los mismos términos y señaló que si avanzamos en ese marco de colaboración, “tenemos que ir viendo el modelo y los compromisos que se puedan derivar en políticas concretas”. Reiteró que la política migratoria del Gobierno central es “clara” y, en este sentido, enfatizó que los inmigrantes sin contrato de trabajo “no podrán albergar esperanzas” de que su situación se regularice.

Lanzó un mensaje taxativo: “Inmigrantes todos los que hagan falta, pero con contrato de trabajo”.

Añadió: “Sin contrato de trabajo han de saber que su único destino es volver a su país. No pueden albergar una esperanza o la idea de que su situación se regularizará o pasará de ilegal a legal”.

El ministro subrayó que ante la actual situación económica “es prioritario contratar en el mercado interior, aunque ello no suponga dejar de hacerlo en los países de origen”.

En este sentido, adelantó que “antes de verano presentará el Plan de Retorno Incentivado para que los inmigrantes que se hayan quedado en desempleo puedan regresar a su país de origen si así lo deciden”.

Menores extranjeros

Preguntado por si tenía previsto visitar algún centro de menores extranjeros o centro de retención de adultos respondió que en esta visita había primado el encuentro con las autoridades.

No obstante, justificó su negativa a visitar este tipo de recintos, “puesto que pertenecen al Ministerio de Interior y no al de Trabajo”. No parece una respuesta justificada debido a que Corbacho es también ministro de Inmigración y, además, estaba acompañado por la secretaria de Estado de Emigración e Inmigración, Consuelo Rumí.

Hoy se desplaza a Gran Canaria donde tiene cita con el Ayuntamiento de Las Palmas y el Cabildo grancanario, además de una visita a Cruz Roja en la provincia oriental.

La cuestión de la inmigración quedó eclipsada por la situación del paro en Canarias y por las declaraciones de Corbacho en referencia a la defensa de primar la contratación de los residentes en el Archipiélago, como pretende el Gobierno nacionalista.

Esta visita precede a la reunión que está prevista para hoy en Madrid entre Paulino Rivero y el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero.