VANESA SUVALSKI CORRESPONSAL

VIENA. Pocos días antes de comenzar la gran fiesta de la Eurocopa de fútbol en Suiza y Austria, los ciudadanos suizos han dado una clara señal contra la xenofobia al rechazar una iniciativa que pretendía endurecer la adopción de la nacionalidad helvética por parte de los extranjeros.

Casi un 64 por ciento de los votos depositados dijeron «no» a la iniciativa del nacionalista Partido Popular Suizo (SVP), que proponía poder rechazar solicitudes de nacionalización de extranjeros sin razones y sin la posibilidad de recurso. Esta práctica existía en algunos municipios suizos hasta el año 2003, cuando el Tribunal Supremo dictaminó como discriminatoria la práctica de votar en asambleas populares sobre conceder o no la nacionalidad suiza a un extranjero.

Más del 20 por ciento de los 7,5 millones de habitantes de Suiza son extranjeros, en parte debido a la rigidez de la actual legislación, que exige vivir en el país al menos durante doce años y aprobar un examen de cultura helvética y de idioma para poder acceder a la nacionalidad. Todos los partidos políticos, con excepción del SVP y su hombre fuerte Christoph Blocher, hicieron campaña contra la iniciativa denominada «Por las naturalizaciones democráticas». Para alimentar su campaña a favor del «Sí», Blocher esgrimió el fantasma de la supuesta naturalización «en masa», sobre todo de personas oriundas en Turquía y países de los Balcanes.

Decepción con el SVP

Algunos analistas suizos destacaron ayer que el SVP ni siquiera logró movilizar a su electorado, lo que parece indicar que la gente está empezando a distanciarse de ese partido, el más votado en las últimas elecciones legislativas de 2007, con un 30 por ciento.

El diario liberal «Tagesanzeiger», de Zurich, aseguró ayer que la iniciativa estaba «demasiado ligada» a la persona de Blocher, polémico ex miembro del gobierno y actual líder de la oposición. Por su parte, el diario conservador «Neue Züricher Zeitung» destacó que muchos votantes parecen haber querido decirle al SVP y a la radical política opositora «así no».

El SVP mostró su decepción con el resultado y consideró una lástima que los ciudadanos no puedan decidir sobre un asunto tan importante como la nacionalización de extranjeros. «Aumentarán los efectos negativos de la naturalización en masa de extranjeros poco integrados, así como los crímenes violentos y el abuso social», manifestó el SVP en un comunicado tras conocerse los resultados de la consulta.