El Gobierno implica a cinco ministerios en una estrategia contra la trata de seres humanos

El Mundo, RAFAEL J. ALVAREZ. Enviado especial, 13-05-2008

De la Vega plantea que los países de Africa modifiquen sus leyes para perseguir la ablación y la poligamia Ante mujeres de 42 países, algunos de los cuales nutren los prostíbulos españoles, María Teresa Fernández de la Vega anunció ayer que el Gobierno está tejiendo una red institucional contra la trata de personas, una estrategia integral porque implica a cinco ministerios para que esos seres humanos no sólo sean rescatados de la explotación sexual y laboral, sino reintegrados a la vida digna.


Era el discurso de inauguración del III Encuentro Internacional España – Africa. Mujeres por un Mundo Mejor, y la vicepresidenta del Gobierno arrancó un buen manojo de aplausos entre las mujeres de un continente «rico, pero empobrecido» que, sin embargo, puede dar algunas lecciones de feminismo a países presuntamente igualitarios. Y si no, que pregunten a Europa y Estados Unidos por una tal Ellen Johnson – Sirleaf, a la sazón presidenta de Liberia.


De la Vega contó que el Gobierno prepara la Ley de Igualdad de Trato, un texto que «perseguirá todo rastro de racismo, discriminación o xenofobia». En la ley se incluirá un Plan de Derechos Humanos y, dentro del mismo, «un programa integral de lucha contra la trata de seres humanos, tanto en el ámbito de la explotación sexual como laboral».


Según fuentes gubernamentales, el plan estará listo antes de que finalice este año, y para ello ya están trabajando cinco ministerios: Asuntos Exteriores, Interior, Asuntos Sociales, Justicia e Igualdad.


Las mismas fuentes indicaron que, además, De la Vega ha planteado a la presidenta del parlamento panafricano, Gertrude Mongelle, la necesidad de que los países de Africa reflexionen acerca de la posibilidad de llevar a cabo pequeñas modificaciones legislativas para erradicar prácticas que atentan contra la dignidad de las mujeres, como la ablación o la poligamia.


Si bien es poco probable que las conclusiones del encuentro incluyan términos como ablación o poligamia, la delegación española se daría por satisfecha con que hubiese una referencia a esas modificaciones.


El discurso de De la Vega estuvo lleno de palabras militantes de mujer, lo que fue saludado con aplausos desde la mayoritaria presencia femenina en el Palacio de Congresos de Niamey. «Las mujeres podemos cambiar el mundo», «somos el mayor motor de nuestros países», «somos ambiciosas y no nos resignamos» o «el futuro pasa por incrementar el empoderamiento de las mujeres», fueron algunas de las frases más interrumpidas con el estilo festivo de asentir que tiene Africa.


Anunció la «discriminación de las mujeres» y aseguró que el 70% de los 1.000 millones de pobres de Africa son mujeres. «Este es un continente rico, pero empobrecido, en el que la mujer se ve sometida a una doble discriminación. Por eso, la igualdad debe ir unida al desarrollo».


Antes, por la mañana, De la Vega ya se había referido, en una entrevista en TVE, a la fotografía en la que posó con un empresario nigerino polígamo y sus tres esposas. La vicepresidenta se justificó en que fue una situación «creada de forma natural y protocolaria», que puede suceder en encuentros de esta naturaleza, pero reiteró que esa imagen es la «manifestación de un drama que hay que combatir». «Ni desde el punto de vista legal, ni cultural, ni de las convicciones personales, puedo compartir ni justificar este tipo de situación», sentenció.

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