Ocio / Exposición

La realidad en estado puro

El Mundo, MARIA LUISA TORIBIO, 13-05-2008

‘34 miradas contra el olvido’ recuerda, a través del objetivo de fotógrafos, la guerra, la marginación y la pobreza Cada fotografía cuenta una historia, la historia de alguien…


Un chaval mira a la cámara, pero no posa, ni intenta salir guapo. Le da igual. Le han rescatado en alta mar junto a 200 compañeros y Arturo Rodríguez lo retrata cuando acaba de llegar a Canarias envuelto en una manta de la Cruz Roja. Quizá tiene hambre, estará cansado por el largo periplo que empezó cuando dio el último paso sobre tierra africana y subió a una balsa precaria, sobre un mar inmisericorde, en busca de una vida que iba a ser mejor…


Colombia, hace tres años. Unos niños de etnia embera que no disponían del lujo de un pediatra murieron deshidratados. Michel Redondo estaba allí y fotografió los cuerpecitos resecos, las mortajas blancas, los bultos doloridos de las madres, el humo de las velas…


En una habitación desnuda, sin cuadros en las paredes, un joven se encoge sobre la cama. Está en un hospital psiquiátrico, en algún rincón de Ucrania. Vive allí con otros 1.500 internos. Viviane Joakim, que fijó en él la lente de su cámara, tendría fuera quien la quisiese. Puede que él no…


Estos relatos corresponden a tres imágenes de 34 miradas contra el olvido, una muestra que promueve la ONG Médicos del Mundo con el apoyo del Departamento de Ayuda Humanitaria de la Comisión Europea. Se concibió, apunta el ex presidente de la organización y vocal de acción humanitaria de la coordinadora de ONG para el desarrollo, Ricardo Angora, «para concienciar a la opinión pública de crisis silenciosas».


Se explica: «En muchas partes del planeta sufren las consecuencias de guerras, epidemias o catástrofes naturales con efectos devastadores». Problemas que, junto con los de las minorías marginadas, «a veces vemos en los medios de comunicación, pero suelen ser realidades que no hacen ruido». ¿Por qué? «Las causas de que no seamos conscientes en nuestra sociedad son geopolíticas. La agenda internacional de los países avanzados está más centrada en la seguridad».


La exposición nació hace dos años en el contexto del festival Visa pour l¿image de Perpiñán, en Francia. Médicos del Mundo pidió fotos que mostraran esas realidades invisibles. Varios fotógrafos, que habían visto a través de sus lentes el horror de esas realidades ignoradas enviaron sus trabajos. Llegaron fotografías tomadas en Irak, en Kenia, en Chechenia, en Afganistán…


De cada portfolio se escogió una imagen, la más elocuente. Así se formó este conjunto de 34 instantáneas, obras de otros tantos profesionales de la imagen que prestaron gratuitamente su trabajo para denunciar con él situaciones que no les gustaron, para hacer de él «una ventana a la realidad».


A través de ella se ven esas situaciones ignoradas. Una de ellas son los conflictos bélicos, «a veces activos, a veces larvados», de cuya existencia «no somos conscientes». Añade Angora: «Son problemas muy complejos en los que intervienen distintos agentes que hacen que los Derechos Humanos no se lleguen a proteger. Y la población sufre las consecuencias…». En otros lugares campan el sida, o la tuberculosis… E incluso, puede que más cerca de nosotros, no faltan «colectivos excluidos por deficiencias físicas o psíquicas, por pertenecer a una minoría étnica, por vivir en la calle…».


Sin embargo, las fotos también «muestran el talento» de quienes las hicieron: «No son sólo denuncia, también estética».


34 miradas contra el olvido ya ha estado en el Parlamento de Portugal y ha formado parte de la oferta cultural de la Noche en Blanco 2007 de París… Ahora llega al patio de la Casa Encendida, donde gritará en silencio durante una semana. «Con la denuncia existe la posibilidad de cambiar políticas de cooperación».


A la muestra se le ha dado la forma de una cámara oscura, de una pequeña habitación donde surgen las imágenes, donde se ponen a la vista, con toda la intención, escenas en las que no habríamos reparado bajo la intensa luz eléctrica de nuestro primer mundo.


34 miradas contra el olvido


. En la Casa Encendida (Ronda de Valencia, 2) hasta el 19 de mayo. Entrada gratuita.

Texto en la fuente original
(Puede haber caducado)