Un grupo de rumanos que ocupaba dos edificios de Elgoibar ubicados en el barrio de Altzola de esta localidad fue desalojado por la Policía Municipal, tras una orden dictada por un juzgado de San Sebastián.

El alcalde de Elgoibar, Alfredo Etxeberria, confirmó a Efe que «personal del juzgado ha acudido al lugar a comunicar la decisión del juez», tras lo cual dichos ocupantes «han recogido sus enseres y han abandonado el lugar sin incidente alguno».

El desalojo de las casas de Aurretxe y Sebastiana, que tuvo kugar ayer a primera hora de la mañana después de la denuncia presentada por el consistorio debido a las numerosas quejas del vecindario, termina con un proceso de ocho meses en los que el lugar se ha visto afectado por los ruidos y la acumulación de basuras. El primer edil elgoibarrés consideró que el asunto está «en vías de estar zanjado» y reconoció que la presencia de estos grupos de rumanos en Altzola ha sido asunto preocupante en los últimos tiempos.

Limpieza y cerramiento

Etxeberria señaló que, tras el desalojo de los inmuebles, el entorno será objeto de labores de limpieza y acondicionamiento, con el fin de que la situación sea «ya soportable» para los vecinos. «Hay que recordar que esos edificios son de propiedad particular», indicó el alcalde, quien subrayó que el coste de la limpieza y cerramiento de los inmuebles correrá a cargo de los propietarios, y que el consistorio elgoibarrés buscará una salida para ese entorno.

El regidor de Elgoibar, tras la ejecución de la orden judicial de desalojo, expresó su confianza en que se solucione la situación, tras un periodo de tiempo en el se han producido hechos que «no son del agrado de nadie».