Calculan que menos cruzan frontera EUA

La Prensa Gráfica, AP, 03-05-2008

La cifra de indocumentados detenidos por la Patrulla Fronteriza se ha ido reduciendo en los últimos años.

Las calles arenosas de Sasabe están desiertas. Los coyotes tienen que buscar clientes en los refugios de los pueblos fronterizos con Estados Unidos. Los inmigrantes deportados desisten después de un solo intento y aceptan resignados los viajes gratuitos de regreso en autobús.

La ofensiva estadounidense está ocasionando la más prolongada y significativa disminución en el número de cruces ilegales desde México después de los ataques terroristas de 2001. Las autoridades dicen que la depresión económica en Estados Unidos, una seguridad más estricta y un viaje más peligroso y caro están haciendo que muchos desistan pronto en su intento.

Los arrestos de la Patrulla Fronteriza han disminuido este año un 17% en la frontera con México, después de caer el 20% en todo el último año fiscal y el 8% el año inmediatamente anterior. Aunque es imposible saber cuánta gente cruza ilegalmente la frontera, la patrulla usa el número de detenciones para calcular el flujo.

En el caso de los salvadoreños, el año fiscal 2007 reportó la detención de 14,108 compatriotas. En el período anterior se documentó el arresto de 41,134 salvadoreños. Hasta la mitad del año fiscal 2008, que comenzó el 1.º de octubre pasado, la Patrulla Fronteriza reporta 6,189 compatriotas detenidos.
Las explicaciones

Las autoridades estadounidenses atribuyen la caída a la mayor seguridad y a un nuevo programa en el sector de Tucson que desde que comenzó en enero ha procesado a más de 3,000 inmigrantes por cruzar ilegalmente. Enfrentan sentencias de cárcel de unos pocos días a seis meses.

Por otra parte, la Patrulla Fronteriza agregó 200 agentes desde el año pasado al sector de Tucson, y actualmente unos 3,000 oficiales exploran el vasto desierto en busca de inmigrantes indocumentados en camión, a caballo, en helicóptero o en vehículos todoterreno. Ahora, hay cuatro aviones no tripulados en busca de indocumentados y narcotraficantes, como también dos nuevos muros de 3.65 metros de alto cerca de Nogales y en Sasabe.

La ofensiva ha hecho que los coyotes estén más desesperados por conseguir clientes.

Durante temporadas anteriores de máximo movimiento, las camionetas y furgonetas llegaban atestadas de gente a Sasabe y de allí se dirigían a los puntos de concentración donde los inmigrantes iniciaban su larga caminata. El pueblo, de 1,500 residentes, podía ver triplicarse su población con los itinerantes.

Ahora los negocios están cerrando, dijo la administradora municipal Ramona Flores. Los expertos fronterizos calculan que el 70% de los residentes se ganan la vida con la inmigración ilegal.

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