La Policía cursa una orden de búsqueda y captura del proxeneta que amenazaba y agredía a las víctimas en pisos de Mollet, Sabadell y BCN Efectivos del Cuerpo Nacional de Policía detuvieron la semana pasada a tresmujeres que explotaban sexualmente a chicas de origen rumano a las que un proxeneta que está en búsqueda y captura amenazaba y agredía después de engañarlas para que vinieran a España con falsas promesas de trabajo. La Policía tiene constancia de que esta red llevaba al menos desde 2005 explotando a víctimas a las que no les dejaban ni salir de los pisos en los que las tenían esclavizadas y que estaban situados en Mollet del Vallès, Sabadell y Barcelona.

Fuentes de la investigación explicaron a EL MUNDO que fue una de las mujeres la que acudió a una comisaría a denunciar la situación que llevaba años viviendo. Esta chica relató que en el año 2005 había sido captada de Rumanía junto a una compatriota con la promesa de que iba a trabajar en España. Sin embargo nada más llegar, Stoian Costinel, un ciudadano rumano de 40 años que está buscado internacionalmente, le amenazó de muerte. Le explicó que iba a prostituirse y que la mitad del dinero que le entregaran los clientes sería para él y el resto le serviría para pagar el alquiler de los pisos en los que iba a vivir. Coaccionada, la mujer accedió. Así empezó a vivir un auténtico infierno que ha durado más de tres años trabajando en clubs y pisos privados de Barcelona, Mollet del Vallès y Sabadell vigilada por colaboradores del proxeneta.

Tras la denuncia de esta joven, los investigadores de la Unidad contra Redes de Inmigración y Falsificación Documental (UCRIF) de la Jefatura Superior de Policía en colaboración con las policías locales de Mollet y Sabadell empezaron a indagar.

En escasos días comprobaron que se trataba de una red que tenía a las chicas en un régimen de casi esclavitud.

Fruto de vigilancias, los policías averiguaron que en un piso de Mollet había mujeres controladas por la dueña del prostíbulo que únicamente les permitía salir del inmueble 15 minutos al día.

La pasada semana, diversas patrullas acudieron a este piso, situado en el pasaje Almirall Marquet, e identificaron a dos de las explotadas, de origen rumano. Paralelamente, se montó el mismo operativo en un inmueble de Sabadell, donde fueron identificadas cuatro mujeres más – tres brasileñas y una de Kenia – .

Las chicas relataron a los investigadores que cobraban 100 euros por una hora, de los que entregaban la mitad a la dueñas de los pisos. Además, por cada servicio sexual, las chicas debían pagar 10 euros en concepto de alquiler. Todas coincidieron en señalar que debían estar disponibles 24 horas al día. De hecho, los agentes intervinieron libretas con los horarios y cuadrantes en los que se ponía de manifiesto esta situación.

Los policías detuvieron en ambos pisos a las tres dueñas de los prostíbulos y vigilantes – dos peruanas y una brasileña – a las que les imputan delitos relativos a la prostitución, coacciones y favorecimiento de la inmigración ilegal. Los investigadores han cursado una orden internacional de búsqueda y captura para el cabecilla de la red, que consiguió huir y que podría tener numerosos pisos similares en Cataluña.