Propuestas para paliar los efectos del paro

Con billete de vuelta

El Gobierno potenciará el regreso de los inmigrantes a sus países de origen

La Vanguardia, , 28-04-2008

JOSEP PLAYÀ MASET – Barcelona

PROGRAMA DE LA OIM Entre el 2003 y el 2007, tan sólo 4.850 inmigrantes se han acogido a las ayudas

DESDE CATALUNYA La secretaría para la Immigració facilitó el año pasado el retorno de 142 inmigrantes
e los 600.000 españoles que entre D 1960 y 1973 emigraron a Alemania se calcula que un 80% regresaron a España en los primeros años de la democracia. La situación dista de ser la misma en la España de principios del siglo XXI y recientes estudios como el II anuario de la comunicación del inmigrante indican que al menos un 70% de los inmigrantes extranjeros se queda de forma definitiva. Pocos son de momento los que deciden regresar.

Aun así, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, propuso en el discurso de investidura el retorno a su país de origen de aquellos inmigrantes que se hayan quedado sin trabajo. Para ello anunció incentivos como la capitalización de las prestaciones por desempleo (cobrarlo todo de una vez) o la concesión de microcréditos que puedan utilizar los inmigrantes en sus países. El ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, se ha mostrado de inmediato favorable a esa propuesta y ha anunciado que en su primera comparecencia ante el Congreso de los Diputados planteará un paquete de medidas encaminadas a contrarrestar el efecto de la desaceleración económica en los inmigrantes y a facilitar el retorno a sus países de origen. “No obligatoriamente, pero sí hay que dar esa posibilidad a través de mecanismos como la capitalización del derecho a desempleo”, aseguró el ministro.

Sin embargo, los programas de apoyo a los inmigrantes para el regreso a su país no siempre tienen éxito. A menudo, el retorno se decide no sólo por el empeoramiento de la situación económica y social del país de destino, sino por las expectativas de mejora en el país de origen. Rumiñahui, una asociación hispano-ecuatoriana, fue la primera en cuestionar la eficacia de unas medidas aún por conocer y en señalar que el retorno no puede ser la única solución al desempleo. El vicepresidente de la Federación Estatal de Asociaciones de Inmigrantes de España (Ferine), Esteban Cancelado, declaró que “el retorno no es fácil” porque “allí la situación y condiciones que les hicieron emigrar siguen siendo peores”.

En España el crecimiento económico de los años 70 y 80, así como la apertura tras la desaparición del franquismo, propició el retorno masivo de miles de españoles que habían marchado a Alemania, Suiza, Francia e Inglaterra. Esta semana el representante en España de la dirección de la Organización Internacional de las Migraciones (OIM), Manuel Pombo, ha señalado que si se cumplen las previsiones sobre aumento del paro, habrá “muy poca gente” que quiera retornar a los países africanos dadas las dificultades económicas, pero habrá mucha gente que lo quiera hacer a Latinoamérica porque la situación allí “es mucho mejor”.

La OIM, que se creó en 1951 para apoyar una migración “ordenada y humana” en todo el mundo, tiene un programa apoyado por el Ministerio de Trabajo español para los inmigrantes que desean regresar a su país, se encuentran en una situación de extrema necesidad humana y no pueden permitírselo. Desde el año 2003 hasta el 31 de diciembre del 2007, un total de 4.850 personas se acogieron a este retorno voluntario (247 eran solicitantes de asilo y el resto inmigrantes), lo que ha supuesto un desembolso de 6,5 millones de euros. El país con más retornos fue Bolivia (793), por delante de Argentina (655), Colombia (578), Ecuador (513) y Brasil (356). En los últimos meses se ha detectado un repunte en las solicitudes de argentinos y brasileños. Otros inmigrantes han decidido también en los últimos años retornar por su cuenta. Las cifras exactas no se conocen aunque son también bajas. Nada que ver con el millón y medio de inmigrantes que han llegado a España en los últimos cinco años.

Pero son cifras modestas. En Catalunya, la OIM firmó también un convenio con la secretaría para la Immigració de la Generalitat en el 2006 para la puesta en marcha del Programa de Retorno Voluntario de Inmigrantes desde Catalunya (Previcat). En el 2007 se recibieron 312 peticiones y se evaluó positivamente el retorno de 196 personas, de las que 142 pudieron reunirse con la familia.

De estos 142 retornados, 56 eran mujeres, 46 hombres y 40 menores acompañados. Hubo hasta 62 que volvieron a Bolivia, el último país del que llegó una importante oleada antes de que España exigiera visado. Entraron como turistas sin permiso de residencia ni de trabajo. Llama la atención que el segundo país sea Honduras, con 21, lo que confirma que en los últimos años han llegado numerosos inmigrantes de este país, especialmente mujeres. El proceso de retorno va al alza porque sólo en los tres primeros meses del 2008 se han recibido ya 106 peticiones. En el año 2006 sólo se recibieron 172 peticiones y 85 se convirtieron en retornos efectivos (entonces el principal país era Argentina). En años anteriores el número de gestiones exitosas había sido mucho más reducido: 73 en el 2005, 38 en el 2004 y 8 en el 2003.

Diversas ONG, como Caritas, colaboran en ese Programa de Retorno Voluntario. Otras, como Cruz Roja, tienen su propio programa para personas que necesitan acompañamiento por problemas de salud en su proceso de retorno. El año pasado Cruz Roja atendió 20 casos, y de ellos seis retornaron.

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