El control se extendió a los clubes de alterne, donde la Brigada de Extranjería identificó a 480 mujeres

Vitoria. La Policía Nacional en Álava trata de erradicar posibles focos de convivencia con la violencia integrista. Por eso, el año pasado identificó, “en prevención de atentados”, a 805 personas extranjeras en lugares públicos tales como la estación de tren o “cafeterías frecuentadas por ciudadanos de nacionalidad extranjera”, según se recoge en el informe de la Fiscalía sobre su actividad en 2007. El resultado – al igual que en el caso de los tres presuntos yihaidistas arrestados en Vitoria por la Ertzaintza y posteriormente puestos en libertad – tuvo poco éxito: 44 de las personas identificadas fueron detenidas “por su estancia irregular en el territorio español, por haber quebrantado un periodo de prohibición de entrada – tras haber sido expulsado por otro país de la UE – , o por constar en su contra una requisitoria judicial”.

No fueron los únicos arrestados. Según la memoria de la Fiscalía Alavesa, durante 2007 la Brigada de Extranjería de la Policía española detuvo, en controles de documentación, a 347 ciudadanos extranjeros; a 276 de ellos se les incoó un expediente de expulsión, de los que se llevaron a cabo 45. Es decir, cada ocho días se expulsó a un inmigrante del territorio histórico; cifra, ésta, por debajo de la registrada en 2007, cuando se obligó a salir de las fronteras del estado a 77 nuevos residentes – uno cada cinco días – .

Algunas de las expulsiones fueron sustitutivas de penas de prisión. Fue el caso de 15 inmigrantes obligados a salir del país. En este sentido, según la Fiscalía el principal delito que cometen los inmigrantes tiene “relación directa con su condición de extranjeros”: se trata, en concreto, de la falsificación de documentos. En 2007 se abrieron 29 diligencias de este tipo.

“La actividad de control” policial incluyó también los clubes de alterne, en los que se identificó a 480 mujeres. Además, los agentes de la Policía Nacional detuvieron en estos locales a 74 hombres extranjeros en situación irregular.

Si bien la mayoría de actuaciones policiales en relación con los inmigrantes consistieron en identificaciones – con las subsiguientes órdenes de expulsión – , así como actividades de “prevención de atentados terroristas”, los agentes tantearon también la otra cara de la moneda: los delitos den que las víctimas son inmigrantes. El año pasado se iniciaron cuatro procedimientos judiciales de este tipo, a los que se sumaron otras diez causas por delitos contra los derechos de los trabajadores en los que la víctima era una persona de otra nacionalidad. Por otra parte, – y si bien Álava no se encuentra entre los principales destinos de los inmigrantes – , las peticiones de nacionalidad por residencia aumentaron en 2007 hasta sumar 742.