aniversario

Luther King vive 40 años después

La Voz de Galicia, Óscar Santamaría | Corresponsal, 04-04-2008

Su hijo ha tomado el testigo de la lucha por la igualdad, a la que todavía le queda un largo camino por recorrer

Su hijo ha tomado el testigo de la lucha por la igualdad, a la que todavía le queda un largo camino por recorrer

Hace hoy 40 años el reverendo Martin Luther King cayó abatido por un disparo en el balcón de la habitación 306 del Motel Lorraine de Memphis (Tennessee). A pesar de todo este tiempo, su legado sigue aún vivo en Estados Unidos, sobre todo entre la comunidad negra y con especial fuerza en este año electoral. Y es que si el doctor King es habitualmente recordado por la clase política y los activistas pro derechos humanos de este país, su presencia en los medios es reforzada ahora por la posibilidad, cada día más real, de que un afroamericano, Barack Obama, llegue a la Casa Blanca.

El Nobel de la Paz tenía 39 años cuando fue asesinado por James Earl Ray, sentenciado a 99 años de cárcel, quien tras ser detenido confesó el crimen para luego retractarse.

Las teorías de la conspiración abundan, y como en el caso del asesinato del presidente Kennedy son pocos los que se creen que un hombre actuara solo. Entre otras cosas, por los muchos enemigos que tenía Luther King, convertido en mártir tras su muerte.

En vida, fue un líder carismático que batalló no solo por la igualdad racial, sino que, más allá del color de la piel, se puso del lado de los desfavorecidos y se levantó ante las injusticias. En alguna ocasión habló de «los tres males» a los que derrotar: el racismo, la pobreza y el militarismo.

Un discurso articulado y bien armado que culminó en su popular «Tengo un sueño», que pronunció en 1963 ante 250.000 personas en Washington.

Desigualdades

En lo que todo el mundo está de acuerdo es en que, a pesar de lo mucho conseguido en todos estos años, aún hay serias desigualdades raciales en la sociedad estadounidense. Una encuesta reciente mostró que el 52% de los estadounidense reconocieron la «gran influencia» de Luther King en esta lucha – de ellos el 75% son afroamericanos – mientras que el 39% de los negros señalaron que «aún hay un largo camino por recorrer» para la plena igualdad racial.

Un compromiso que ha heredado su hijo, Martin Luther King III, quien fundó en el 2006 la organización Realizing the Dream, que trata de acabar con «los tres males» de los que habló su padre y que salieron a flote tras el azote del huracán Katrina en Nueva Orleáns, cuando miles de afroamericanos pobres esperaron muchos días la ayuda del Gobierno mientras estaban atrapados en la ciudad y rodeados de agua.

Muchos culparon del retraso de la ayuda a que no había suficientes miembros de la Guardia Nacional disponibles por estar sirviendo en Irak. Negros, pobreza y guerra.

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