BROWNSVILLE, Texas. El aspirante presidencial demócrata Barack Obama dijo ayer que, de convertirse en presidente de Estados Unidos, autorizaría un presupuesto de 2 mil 700 millones de dólares cada año para un extenso programa de apoyo al desarrollo de México y América Latina.Es el monto que el gobierno destina a la guerra en Irak en una semana. No tiene sentido, dijo en una reunión con líderes de distintos credos religiosos, todos de origen latino. Una verdadera relación de socios y amigos debe de sustentarse en un plan de ayuda económica a toda la región, y en ese plan está incluido México.El precandidato pronunció un discurso en el que se refirió varias veces a México y volvió a tocar el tema de la migración. Insistió en que es un absurdo el muro fronterizo que el gobierno de George W. Bush planea construir a finales de 2008. En México existe una enorme riqueza, el problema es que no llega a todos los mexicanos, dijo. Lo que EU tiene que hacer es comprometerse a ayudar a México para que la gente más pobre pueda ayudarse a sí misma.En México, dijo es particularmente difícil la situación de quienes viven en las áreas agrícolas y eso los lleva a decidir mudarse a las grandes ciudades para sobrevivir.Obama y John McCain, el más probable candidato republicano, coincidieron ayer en Texas. Al – Qaeda no está derrotado, dijo McCain al referirse a la declaración de Obama en el debate del martes pasado, respecto a que traería de regreso a EU las tropas apostadas en Irak.Si queremos poner una fecha para el retiro de las tropas, ese día será nuestra rendición, dijo el republicano, que desdeñó las críticas de Obama a su decisión de ir a la guerra con Irak. Es cosa del pasado, advirtió.Sobre la frontera con México, Obama mencionó que está de acuerdo con implementar un sistema efectivo de vigilancia en la zona que divide a ambos países. No debemos permitir que miles de personas continúen cruzando, señaló. Indicó que también estaría decidido a perseguir con todo rigor a los patrones que se aprovechan de la mano de obra de los inmigrantes indocumentados.El senador por Illinois se mostró en favor de impulsar una reforma migratoria extensa que permita la integración de los millones de inmigrantes que ingresaron a EU ilegalmente. En medio del aplauso de los líderes religiosos, recordó que todos somos extranjeros en la tierra de Dios.Después, dijo que un elemento clave en la solución del problema migratorio es que EU se comprometa y marche con México, para ayudarlo a mejorar la situación de sus habitantes.