El ‘popular’ Vidal – Quadras cree que la extranjería está «fuera de control» El cabeza de lista de CIU a las próximas elecciones generales, Josep Antoni Duran Lleida, ha propuesto hoy a PP y PSOE un gran pacto de Estado para la integración de la inmigración que implique a los gobiernos del Estado, de comunidades autónomas y de ayuntamientos y a la sociedad civil.

Según informó la federación nacionalista, Duran hizo estas declaraciones tras inaugurar en Barcelona la jornada de CiU sobre la ley de dependencia y de servicios sociales.

Duran ha propuesto a José Luis Rodríguez Zapatero y a Mariano Rajoy un gran pacto de Estado de integración de la inmigración y ha apostado por «fijar las condiciones» para la integración de los inmigrantes que pasan por la aceptación y el conocimiento de la lengua como cuestión básica y por aceptar la cultura de nuestra sociedad y los contenidos que marcan el sistema democrático y de libertades de la Constitución.

Además, cree que en este pacto hay que fijar las condiciones para la nueva inmigración de futuro y ha apostado por contratar en origen. Aunque dijo que es de los que piensa que aquí no cabe todo el mundo, «eso no quiere decir que no puedan venir personas y tampoco quiere decir inmigración cero, que no es viable, ni posible, ni deseable».

Sobre esta misma cuestión, el ex dirigente del PP en Cataluña Alejo Vidal – Quadras consideró que el contrato para inmigrantes que propone Rajoy está justificado porque la inmigración en España «está fuera de control». Según Vidal – Quadras, el contrato de integración «responde a un problema real» y permitiría «poner en orden una cuestión de gran impacto social». El actual vicepresidente del Parlamento Europeo criticó la gestión que se ha hecho los últimos años, y afirmó que «ha sido un caso flagrante dentro de la Unión Europea de falta de control». En este sentido, recordó que precisamente algunos de los sistemas de control que se aplican en otros países europeos se basan en propuestas como la de Rajoy, y puso los ejemplos de Reino Unido, Bélgica, Francia y los países nórdicos.

El eurodiputado defendió que el contrato en cuestión no obliga a nada que no sea «absolutamente razonable y compatible con una sociedad abierta», y recordó que sencillamente busca un compromiso por parte de los inmigrantes que van a tener residencia legal en España.

«Son una serie de requisitos, de muestras de voluntad de integración, que se solicitan a un conjunto de personas que puede que incluso lleguen a tener la nacionalidad española». Se refirió, también, al conocimiento de idiomas por parte de los inmigrantes. A su parecer, deben tener facilidades para aprender castellano y la lengua cooficial de la comunidad. De todos modos, matizó que la lengua de integración sería el castellano «porque en una economía global querrá tener movilidad en todo el territorio nacional».

El debate sobre la inmigración también se saldó ayer con duras acusaciones por parte del vicesecretario general del PP de Cataluña, Xavier García Albiol, quien acusó al PSC de ser el «principal aliado» de las mafias de la inmigración ilegal y de la inseguridad ciudadana que genera esta situación. Lo argumentó diciendo que cuando el presidente de la Generalitat, José Montilla, era presidente de la Diputación de Barcelona promovió un informe dirigido a los ayuntamientos para explicar cómo «evitar» una respuesta a las peticiones de la Policía sobre datos de inmigrantes ilegales empadronados. El secretario de Organización del PSC, José Zaragoza, le respondió que «el PP es un partido que se ha visto implicado en procesos judiciales contra grupos mafiosos que traficaban con personas».