"En Francia no hay lugar para la poligamia y el velo en la escuela"

El País, J. M. M. F., 09-02-2008

El presidente francés aprovechó la presentación del plan para los barrios más pobres para defender el proyecto lanzado la víspera por el ministro de Inmigración, Brice Hortefeux, de establecer un sistema de cuotas de inmigración. Los extranjeros que decidan instalarse en Francia, dijo Nicolas Sarkozy, deben respetar “la cultura, los valores y las leyes” del país. “No hay sitio en Francia para la poligamia, no hay sitio para la ablación, no hay sitio para el matrimonio forzado, para el velo en las escuelas ni para el odio a Francia. Porque detrás de eso está la ley de la tribu. Y si se vive en Francia, quiero que se respete Francia”, manifestó.

Francia recibe, por un lado, un considerable flujo de inmigrantes – mucho menor que el de España – mediante el reagrupamiento familiar, pero paradójicamente necesita inmigrantes para cubrir la demanda laboral en determinados sectores como la construcción o los servicios. Sarkozy quiere un sistema parecido al de Estados Unidos, en el que el Parlamento fija cada año el número de extranjeros a los que permite instalarse en el país, y establece cuotas, tanto por el lugar de origen como por profesiones.

Sarkozy recordó la ley recientemente aprobada que establece filtros para acceder al reagrupamiento familiar, concretamente que quien lo reclame disponga de recursos para acoger a los que llegan y que éstos, a su vez, aprendan la lengua y acepten los valores de la República. “Quien se instala en Francia”, dijo, “debe respetar nuestra cultura, nuestros valores y nuestras leyes”. El presidente hizo un llamamiento al “orgullo” de ser francés, para lo que es necesario, según el dirigente, que los colegios de la República “se atrevan a enseñar qué es la nación y a respetar la patria”.

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