El Consell se ha comprometido a destinar 400 millones de euros en los próximos cuatro años a los programas de cooperación y desarrollo, cifra que supondrá superar por primera vez con estas partidas el 0,7% de los presupuestos. Y el consejero de Inmigración y Ciudadanía, Rafael Blasco, que ayer presentó el Plan Director de la Cooperación Valenciana 2008 – 2011 a las organizaciones dedicadas a la ayuda en los países desfavorecidos, invitó a sus representantes a fiscalizar estas líneas directrices para ver si la Generalitat cumple sus promesas. Quizá para que no pase como el año pasado, cuando el Consell redujo la partida destinada a cooperación, que era de 65 millones de euros, mediante una modificación presupuestaria, en 33 millones, que se dedicaron a los fastos náuticos de la Copa del América.

Blasco presentó ayer el plan de la Generalitat ante más de 200 personas, representantes de ONG, de las universidades, de oficinas consulares de varios países, Ayuntamientos y organizaciones empresariales. En el acto se comprometió a duplicar las inversiones para superar la barrera del 0,7%. “Cerca de cinco millones de personas de tres continentes se verán beneficiadas por estas políticas”, explicó Blasco, “además de los más de 800.000 inmigrantes que viven en la Comunidad”, a quienes están dirigidas las líneas de “sensibilización” del plan.

El plan director de Blasco concentra geográficamente las inversiones para “lograr un mayor nivel de impacto” en los 43 países en los que se prevé destinar la ayuda. También establece la creación de Oficinas de Cooperación Valenciana en el Exterior y el Consejo Valenciano de Cooperación al Desarrollo, una institución ya prevista en la ley de Cooperación aprobada hace un año pero aún no constituida.

Precisamente, la inexistencia de este consejo fue criticada ayer por las ONG, a las que en el acto de presentación no se les dio la palabra. “Nos hubiera gustado que el plan director no hubiera nacido ahora sino que, siguiendo las pautas contempladas por la ley, hubiera sido producto de un trabajo serio, profundo del Consejo Valenciano de Cooperación”, se lamentó la presidenta de la Coordinadora de ONG para el Desarrollo, Gloria Bigné. En su opinión, habría que haber prorrogado el anterior plan, “que no ha sido evaluado”, crear el Consell, aprobar planes anuales de inversión y consensuar con calma otro plan director que no se vea afectado por las citas electorales. Desde la aprobación de la ley poco se ha podido hacer, con unas elecciones en medio y la creación de la nueva consejería.

Desde Iniciativa del País Valencià, Isaura Navarro recordó que el gasto de la Generalitat en cooperación en 2007 solo fue del 0,22% de los presupuestos tras el desvío de fondos.